“Si no lo hacemos volveremos a repetir el mismo error que en 2018”

Cuando Zinedine Zidane firmó por el Real Madrid en marzo de 2019 lo hizo tras el compromiso de Florentino Pérez de facilitar al entrenador la renovación en un vestuario que lo había ganado absolutamente todo y que vivía el ocaso de un periodo plagado de éxitos. Bajo esa premisa aterrizó Zizou de nuevo en la capital de España: dar un lavado de cara a un conjunto con el que había logrado lo que nunca nadie antes había hecho, ganar tres Champions League en cuatro años.

El presidente blanco era consciente de que alguno de los descartes de Zidane tenía un salario muy alto y varios años de contrato, como ocurre con James Rodríguez, Gareth Bale, Mariano Díaz o Brahim Díaz. Esos jugadores pondrían muchas trabas para salir, ya que es difícil que otros equipos les mantengan el sueldo y así fue. Ninguno de los descartes abandonó el club y Zidane tuvo que tragar sapos y culebras.

Ahora bien, con lo que no contaba Florentino Pérez era con una pandemia a nivel mundial que contraería el mercado en este 2020 y que volvería a poner en riesgo el plan de Zidane de renovar un equipo con menos hambre de títulos y con una media de edad muy elevada. Esta situación, aunque en un primer momento puso en riesgo la salida de las grandes estrellas como Bale no está impidiendo que bastantes descartes del técnico francés vayan encontrando equipos: Javi Sánchez vendido al Real Valladolid, Borja Mayoral muy próximo a un acuerdo para abandonar el club, Mariano también muy cerca de firmar con el Benfica y James Rodriguez a un paso de cerrar su traspaso con el Everton inglés.

Pero una cosa está clara y es que Zidane no se olvida de que esta renovación tiene dos pasos: uno el de las salidas y otro, también muy importante, el de la llegada de futbolistas que mantengan o suban el nivel de lo ya presente. El campeón del mundo con Francia (1998) ya le ha comunicado a Florentino que esta temporada se ha visto que aún están lejos de poder competir de tú a tú con los equipos más importantes de Europa. Del mismo modo, LaLiga tiene mucho valor pero Zidane es también consciente que durante su disputa el Barça ha vivido el periodo de mayor inestabilidad institucional ocurrido en el club de los últimos 20 años.

Es por ello que Zidane no quiere que ese ansiado título liguero tape las carencias de un equipo que aún tiene mucho camino que recorrer para volver a ser el temido club que reinó en Europa durante casi un lustro. Aquellas Champions de un modo u otro evitaron hacer cambios necesarios en el Madrid pero Zidane ha aprendido de aquello y no está dispuesto a tropezar en el mismo punto. Así se lo ha hecho saber a Florentino Pérez. Ahora será el presidente y Jose Ángel Sánchez quienes deberán cumplir con el segundo paso de la renovación, las citadas llegadas...