Simeone acelera para enero: fiasco con De Paul, palo a Saúl y llega él
El crack podría ser la solución a varios de los problemas que tiene el Atlético de Madrid actualmente
No, Simeone no tiene muchos motivos para el optimismo en la lucha por las aspiraciones del equipo esta campaña. Es cierto que en el campeonato liguero los rojiblancos están a tan solo tres puntos de liderato con varios partidos aún pendientes de disputar, pero la plantilla está evidenciando diversos problemas en las diferentes líneas del terreno de juego que en la Champions League le están pasando factura hasta el punto de estar viviendo una situación crítica en la competición europea: una derrota en Anfield dejaría casi fuera de los octavos de final a los colchoneros.
Precisamente la línea creativa del equipo está brindando la gran parte de los problemas que a día de hoy tiene Simeone dentro del vestuario ya que, a pesar de que Rodrigo de Paul llegó despertando unas expectativas muy altas, el rendimiento del argentino no está siendo del todo gratificante para las necesidades atléticas. Es por eso que, según ha afirmado Goal en las últimas horas, el técnico porteño podría mover ficha en enero con una incorporación de primer nivel europeo, la de Corentin Tolisso, futbolista que ha perdido completamente su peso en el Allianz Arena y que podría protagonizar el próximo fichaje del Atlético de Madrid.
El jugador del Bayern Múnich no está entrando apenas en juego desde que Nagelsmann tomó las riendas del conjunto alemán y, dado que termina contrato en junio de 2022, su fichaje se ha postulado bastante placentero para los intereses del conjunto madrileño ya que el campeón de la Bundesliga apenas pondrá reparos para dejar salir al francés si la oferta alcanza los 12 millones de euros, una cifra más que asumible para el conjunto español.
Además, si se oficializa la llegada de Tolisso en el mercado invernal, supondría un palo muy duro para un Saúl Ñíguez que, sin estar apenas teniendo minutos en el Chelsea, tiene en mente romper su cesión con el conjunto azulón para regresar a Madrid lo antes posible, es decir, en el propio mes de enero, algo que la llegada del centrocampista galo de 27 años podría truncar de forma vertiginosa dadas las preferencias que a día de hoy tiene Simeone en su cabeza.