Simeone le elige a él como revelación y desata la ira de Luis Suárez
Joao Félix tampoco es el hombre elegido por el entrenador argentino
Si algo ha quedado de manifiesto tras el último mercado invernal y el posterior comienzo de las competiciones es que el Atlético de Madrid ha cerrado una de las mejores plantillas de su historia. Algunos futbolistas de renombre han aterrizado en el club colchonero en los últimos años y otros, pese a no venir con el cartel de superestrellas, han terminado conquistando a Diego Pablo Simeone. A pesar de que el club no pudo cerrar finalmente de la llegada de Edinson Cavani, lo que habría supuesto un aumento estratosférico del nivel del equipo, el Atlético sigue albergando en su plantilla algunos de los mejores jugadores del mundo. Y no, ninguno de ellos se ha convertido en los favoritos del técnico.
El centrocampista Marcos Llorente, fichado hace poco más de un año procedente del Real Madrid, es el jugador sobre el que giran una gran parte de las esperanzas del equipo esta temporada. Tras llegar como un descarte de Zidane ante los pocos minutos que tenía con él por el excelente rendimiento ofrecido por Carlos Henrique Casemiro, se ha reconvertido como mediapunta en el césped del Wanda Metropolitano y es ahora donde está rindiendo al mejor nivel.
La modificación posicional introducida por Simeone deja entrever que quizá Llorente haya desperdiciado unos cuantos años de su carrera jugando por delante de los centrales. Aunque en su etapa en el Alavés como creador de juego se convirtió en uno de los mejores jugadores de la liga española, ahora es donde está sacando todo el jugo de su calidad y donde más fehacientemente se puede dar fe de ello.
Como socio de Luis Suárez y Joao Félix en la delantera, ha conseguido ganarse la simpatía tanto de su entrenador como de sus aficionados y hoy en día se ha perfilado como el jugador más indiscutible de la plantilla del argentino, por delante incluso de las dos estrellas más mediáticas del club. No obstante, de sobra es conocido el carácter ganador del charrúa, que tratará de estar más fino de cara a puerta para que las miradas vuelvan a recaer sobre él y no sobre ningún otro miembro de la plantilla: competencia sana y una delantera de ensueño, Simeone lo tiene todo para luchar por el triplete.