Sin vuelta atrás: el error de Xavi en el Barça es real, palo a LaLiga
Miralem Pjanic debutó con gol y asistencia en el Sharjah, donde también milita Paco Alcácer
Poco después de hacerse oficial el fichaje de Miralem Pjanic por el Sharjah, las consecuencias de su salida para el Barcelona no se han hecho esperar. El bosnio debutó con gol y asistencia en la victoria de su equipo por 3-0 al Baniyas de la liga de los Emiratos Árabes, y Xavi empieza a darse cuenta de haber fallado al dejar escapar a un jugador con el que contaba para su proyecto. Así lo manifestó el técnico de Terrasa durante la pretemporada culé, pero finalmente las circunstancias económicas impidieron que el mediocentro acabara siendo parte del club azulgrana esta temporada. Su marcha no fue fácil de asimilar, y con noticias como éstas que hablan de su aprovechable nivel, no sólo el Barcelona, sino también LaLiga sale perdiendo.
Precisamente, un ex del campeonato español como Paco Alcácer también milita en las filas del Sharjah, y fue objeto del penalti que transformó, Pjanic para firmar el segundo tanto del partido. Previamente, el bosnio se inventó el pase que su compañero Salem Sultan aprovecharía para abrir la lata en el encuentro. Una destacada actuación sobre la que el ex azulgrana hizo esta valoración al finalizar el partido: “Vine aquí con la intención de jugar durante mucho tiempo y ayudar a mi nuevo equipo a ganar títulos. Lo he logrado con muchos clubes en los que jugué y quiero hacer lo mismo en Sharjah”, concluyó en declaraciones recogidas por ‘Thenationalnews.com’.
Lo cierto es que Pjanic no tuvo la suerte de triunfar en el Barcelona, club en el que recaló en 2020, ya en medio de un ambiente un tanto turbio por los problemas económicos que azotaban a la entidad presidida por aquel entonces por Josep María Bartomeu. Su primera temporada dispuso de apenas minutos, y en la siguiente se marchó cedido al Besiktas turco. Fue a su vuelta de préstamo cuando a Xavi le llamó la atención las maneras bosnio en lo que parecía que sería la temporada de su irrupción definitiva en el primer equipo.
Sin embargo, el club terminó por vender a un jugador que pudo pagar el esfuerzo económico realizado por el club en los flamantes fichajes que Xavi demandaba.