Su regreso al Bernabéu, complicado: 3 cracks a prueba para Florentino
El presidente duda mucho sobre el futuro de los cedidos
Son varios los jugadores que, ante la abundancia de efectivos existentes en la actual plantilla blanca, han tenido que ver la puerta de salida de Chamartín en el último verano. Takefusa Kubo, Brahim Díaz y Álvaro Odriozola no han cumplido con las expectativas depositadas para contar con un hueco este año a las órdenes de Carlo Ancelotti y su futuro en Madrid pende de un hilo.
Florentino Pérez y el propio ‘Carletto’ tienen lo que resta de temporada para decidir qué hacer con ellos. Eso sí, hasta el momento sus credenciales han sido muy malas y, de seguir al mismo nivel, su regreso al Bernabéu se prevé casi imposible.
Por un lado, Brahim está afrontando su segundo curso cedido en el AC Milan y, pesar de haber comenzado la campaña como uno de los fijos en el esquema de Stefano Pioli, no está rindiendo al nivel esperado en San Siro y sus minutos podrían empezar a verse afectados. Durante el último tramo de la temporada pasada el jugador malagueño sí dejó sobre el terreno de juego de forma regular muestras del inmenso talento técnico que atesora, pero si no recupera esas sensaciones difícilmente podrá tener un hueco en el futuro vestuario del Real Madrid, a pesar de que tiene contrato con la casa blanca hasta el año 2023.
El caso de Takefusa Kubo es algo similar ya que, tras cuatro cesiones protagonizadas en los dos últimos años (Mallorca, Villarreal, Getafe y el conjunto balear de nuevo) no ha terminado de rendir de forma constante al nivel que se espera en Chamartín y por eso las esperanzas de verle triunfar de blanco en el Bernabéu se están desvaneciendo progresivamente. Es cierto que ha arrancado el curso siendo titular en el esquema de Luis García Plaza, pero su rendimiento en el cuadro bermellón no está siendo diferencial y, si no revierte la situación, Kubo tendrá un pie y medio fuera del Real Madrid el próximo verano, pero esta vez de forma definitiva.
Por último, Álvaro Odriozola es el que más complicado de los tres lo tiene, sobre todo porque la Real Sociedad parece estar decidida a lanzar una oferta por el jugador conforme finalice la temporada y su cesión en la Fiorentina, club al que salió prestado en los últimos compases del mercado de fichajes veraniego. Es decir que, o su rendimiento es excelso en el conjunto viola (no ha comenzado el curso dejando sensaciones esperanzadoras para ello), o será irremediable su venta conforme finalice la temporada.
