Tras 10 años, Simeone abre la puerta y Uruguay alucina: habrá lágrimas

Por primera vez desde que llegó a Madrid el entrenador está dispuesto a prescindir de su intocable

Tras 10 años, Simeone abre la puerta y Uruguay alucina: habrá lágrimas

El Atlético de Madrid está atravesando una de los momentos más críticos desde que Diego Pablo Simeone llegó al equipo como entrenador y, dado que la dinámica se viene presenciando desde la campaña pasada, a final del presente curso el entrenador está decidido a tomar decisiones drásticas para alimentar de savia nueva un vestuario que actualmente está derruido.

Esto viene dado, como es obvio, por el nefasto rendimiento de muchos futbolistas que integran la actual plantilla rojiblanca y hay un jugador en especial que está recibiendo un sinfín de críticas últimamente y las cuales le han situado en la lista de transferibles: José María Giménez.

Giménez

A pesar de ser el jugador que lleva más tiempo en la plantilla rojiblanca y ser durante mucho tiempo indiscutible en el esquema de Simeone, el rendimiento de central uruguayo de 27 años está dejando mucho que desear, tanto que su continuidad en el Cívitas Metropolitano en la temporada 23/24 no está ni mucho menos garantizada.

Giménez está afrontando su décima campaña en las filas rojiblancas y, a pesar de haber sido durante mucho tiempo una piedra angular del proyecto, Simeone está considerando abrir la puerta de salida al defensa en lo supondría una despedida sumamente dolorosa del futbolista atendiendo al cariño que se ha ganado durante su larga estancia en Madrid. 

Y en esto también tiene que ver mucho la predisposición de dos clubs de renombre en Europa a fichar al central uruguayo al finalizar la presente campaña: Arsenal y Juventus. Según ha recogido BeSoccer, tanto el equipo inglés como el italiano llevan varias semanas monitorizando la situación de Giménez con vistas a brindar el cambio de aires que el jugador parece estar dispuesto a dar para tratar de recuperar su mejor versión, la cual lleva sin mostrar en Madrid mucho tiempo.

Es cierto que el central charrúa tiene contrato hasta 2025, pero Simeone y el propio jugador parecen estar dispuestos a separar sus caminos al término del presente curso, algo que permitirá al conjunto madrileño rescatar una cifra en torno a 40 millones con la que posteriormente realizar otra incorporación que sea del gusto del técnico porteño.