Umtiti, momento límite: Laporta desesperado, no volverá a ver a Messi

Que Samuel Umtiti es uno de esos jugadores que ahora mismo estorban en la plantilla del Fútbol Club Barcelona no es ningún secreto. Las dudas que viene dejando el central prácticamente desde su llegada al Barça hace ya seis temporadas nunca han desaparecido y Xavi Hernández tampoco confía en él como para otorgarle el beneficio de poder formar parte de la plantilla el próximo curso. Por eso, la entidad está como loca por venderlo y quitarse de encima una ficha que va a tener que soportar hasta el 2026, cuatro años más.

Parece que este va a ser el verano en el que el galo abra la puerta de salida pero lo cierto es que no lo está teniendo nada fácil el conjunto catalán para colocarlo en otro destino. Son varios los equipos que se han interesado por él y han llamado preguntando por su situación pero hasta el momento ninguna de las opciones ha fructificado y prácticamente la mitad del mes de julio ya ha pasado y Umtiti sigue vistiendo la camiseta del Barça. 

La última decepción para Joan Laporta ha llegado con el Rennes. El club francés parecía muy dispuesto a llevarse al defensa de vuelta a la Ligue1 y el galo veía además con buenos ojos la opción de regresar a su país, es cierto, dando un paso atrás en sus aspiraciones deportivas. Sin embargo, cuando todo parecía encarrilado a la entidad francesa le han entrado serias dudas acerca de su contratación. Según apunta el medio de comunicación Relevo el Rennes no está para nada convencido de lanzarse a por un futbolista que en la última temporada tan solo ha disputado un único partido ya que dudan de su condición física y de cómo llegaría para encarar el nuevo curso.

Y es que la campaña 2021/2022 ha hecho mucho daño a Samuel Umtiti. Se ha pasado el año en blanco y para una carta de presentación, alegar que el futbolista tan solo ha jugado 90 minutos en una temporada completa es un dato demoledor que hace mucho daño. Por eso, el Rennes se está pensando seriamente si retirarse de la puja y mientras tanto el Barça sigue tirándose de los pelos desesperado.