Un deseo de Florentino Pérez en La Liga Santander renueva con su club

El Real Madrid puede ir olvidándose

Un deseo de Florentino Pérez en La Liga Santander renueva con su club

El Real Madrid puede ir borrando un nombre de su agenda. Porque Uros Racic, que hace unas cuantas semanas fue vinculado al cuadro dirigido por Zinedine Zidane, ha aceptado la última oferta de renovación que le ha hecho el Valencia. Una muestra de lealtad, ya que se quedará a pesar de la crisis que atraviesa el conjunto ‘ché’, que ha perdido a muchos jugadores, y cuyo proyecto se está desmontando. En él, el internacional serbio sub 21 será pieza clave.

O eso, al menos, le han prometido, pues de momento solo ha jugado 18 minutos en esta temporada. Por fin le ha llegado el momento de demostrar su valía en Mestalla, al que llegó en verano de 2018 procedente del Estrella Roja, a cambio de apenas un par de millones de euros. Comenzó jugando en el filial, en Segunda División B, donde despuntó bastante, motivo por el que en enero se fue a préstamo a las filas del Tenerife, en La Liga SmartBank.

Racic

Y, el verano pasado, decidieron que se marchara al Famalicao, recién ascendido a la Liga NOS de Portugal, y club donde Jorge Mendes tiene mucha influencia. Y no hay dudas de que aprovechó su aventura allí, pues impresionó a todos, y rindió a un gran nivel, lo que le ha hecho colarse en la agenda de varios clubes. Entre ellos, por ejemplo, el Manchester United, que se decía que estaba preparando una oferta de 30 millones de euros.

También, del Madrid, ya que Florentino Pérez había sido avisado del potencial de esta promesa de 22 años, que destaca por su visión de juego y su planta, ya que mide la friolera de 193 centímetros. Pero ha sido descartado, después de que el propio Racic reiterara su deseo de asentarse en La Liga Santander, y de hacerlo con el Valencia. Está llamado a hacer olvidar la figura de Dani Parejo, el capitán, que se marchó al Villarreal a coste cero.

No le perderán de vista durante esta temporada, pero, por el momento, no harán ninguna oferta para llevárselo. En un futuro, nunca se sabe.

No se puede descartar nada.