¡Víctor Font quiso destrozar al Barça! El secreto que sale a la luz

Víctor Font es uno de los tres finalistas que quedan para asumir la presidencia del Barça. Hasta hace unos meses, muchos se atrevían a colocarle como el gran favorito para tomar el control, un papel que ahora ha caído en manos de Joan Laporta, que parte con una ventaja insultante respecto al resto. Porque la campaña electoral que ha hecho ha sido perfecta, a diferencia de la del primero, que se ha basado en mentiras y en promesas sin fundamento.

Prometió muchas cosas que luego se demostraron que no eran ciertas, como el regreso al club de Xavi Hernández y de Jordi Cruyff. Y ambos han acabado desmarcándose de su candidatura, en especial, el segundo, de una manera tajante y contundente. Pero es que, por si no fuera suficiente con ese ridículo, ahora Toni Freixa, el otro aspirante al trono que dejó libre Josep María Bartomeu en octubre con su dimisión, ha sido el encargado de ridiculizarle.

Porque ha dado a conocer al público una cosa que se tenía guardada en silencio, y que demuestra que quiso destrozar al club azulgrana desde dentro. Porque el empresario catalán, uno de los fundadores del diario ARA, fue proclive a la venta de Leo Messi el pasado verano, cuando pidió salir, con la carta de libertad, para poner rumbo al Manchester City de Pep Guardiola. Algo que no ha sentado nada bien entre los aficionados que han escuchado esto.

Font quiso engañar a todos, afirmando que tenía un plan para convencer al astro argentino para que renovara, y siguiera en el Barça. Una vez más, queda retratado, y muestra su cara oculta a la gente. Por suerte para todos, será Laporta el que asuma el control, a partir del siete de marzo, fecha en la que se celebran las votaciones para los socios. Él sí es la única esperanza para los fans que todavía no dan por perdido al capitán, por más que sea muy difícil.

A diferencia del resto, él solo ha prometido cosas factibles, y ha demostrado tener un fundamento. A parte, ya tuvo el control en el Camp Nou entre 2003 y 2010.

Para muchos, la mejor etapa de la historia de la entidad.