¡O viene o me voy! Zidane cambia de objetivo y amenaza a Florentino Pérez
Ya no habla de Pogba o Haaland. Ahora le quiere a él
Zidane lleva dando la turra con Paul Pogba desde que volvió a ser entrenador del Real Madrid. La cosa al principio parecía complicada, pues el francés no convencía a la dirección deportiva. Pogba tiene un estigma que arrastra desde que debutó como profesional. Dicen de él que es un mal compañero y un caprichoso que rompe vestuarios. Eso no gustaba nada al Real Madrid, Zidane insistía en que era todo una imagen errónea que habían proyectado del ex de la Juventus.
Pese a que este año ha reafirmado con su comportamiento lo que decían de él, tras el éxito de Zizou con Valverde, el Madrid y Florentino querían darle su capricho. Pero ahora ha cambiado de objetivo.
El entrenador francés se ha obsesionado con un joven del Borussia de Dortmund, y no es Haaland. Zidane dice ahora que sí el Madrid quiere contar con él en un futuro próximo, tiene que firmar a Jadon Sancho. Florentino se desespera. ¿Se tiene que lanzar ahora a una operación que ya habían dejado atrás?
Al inglés el Madrid le lleva siguiendo desde la temporada pasada, cuando el propio Zidane les dio un informe del jugador inglés. Su año pasado en Alemania fue espectacular, el Madrid estaba preparado para ofrecer 100 millones por él en verano, pero Zidane se empeñó en firmar a Paul Pogba. Sancho quedó en un segundo plano.
El año del ex del City ha sido si cabe mejor que el anterior. 17 goles y 19 asistencias en todas las competiciones que reafirman la vitola de estrella del extremo internacional por Inglaterra. Sancho lleva negociando con el Manchester United desde enero. El club inglés tiene el ok del jugador, pero falta cerrar las cifras de su traspaso con el Borussia. El Madrid siente que ya va tarde.
Sin embargo, Zidane ha visto que será el jugador más diferencial de la próxima década. “Tiene más cosas que Mbappè”, dicen desde el entorno del francés. El técnico sabe que Francia le quiere tras la Eurocopa y quiere forzar con esta baza para conseguir sus caprichos este verano. Parece que es un pulso por momentos, “o viene él o me voy”. Florentino Pérez comienza a perder la paciencia. Y sabemos que el presidente blanco es de mecha corta.