¡Vienen a por Vinicius y Florentino quiere aceptar pero Zidane se niega!

Vinicius Junior es un jugador especial. De esos que producen cosas diferentes en todo momento. Un jugador de los que a la grada gusta ver siempre y de los que pueden hacer lo mejor y lo peor. Dependiendo de su estado anímico. Y ese ese estado anímico el que Vini debe controlar para llegar a ser un jugador de clase mundial. Condiciones físicas y técnicas tiene de sobra.

Pero es que Vinicius piensa demasiado cuando juega. Y el pensar en el fútbol siempre viene bien. De hecho, es algo que los entrenadores hacen cada vez menos y se nota. No fuerzan a sus jugadores a pensar. Demasiados movimientos de automatismo que producen un fútbol mucho más predecible, y a la postre, aburrido.

Vinicius es todo lo contrario. Es impredecible y en muchas ocasiones indescifrable. Pero es ese exceso de pensamiento lo que le hace fallar. Miles ideas se cruzan en su cabeza y ninguna es clara. Cuando tiene que tirar pasa, cuando tienen que pasar tira. Cuando debe definir con tranquilidad lanza un pelotazo al portero, cuando debe reventarla decide colocarla.

La frustración forma parte de él y de su juego. Pero hay días lucidos como el pasado partido contra el Espanyol donde es imparable. Su zancada y potencia le convierte en un jugador diferente. En un jugador que rompe partidos y rompe momentos. Tiene que potenciar eso y tranquilizarse a la hora de decidir y será un jugador dominante en el fútbol mundial.

Brasil se juega ir a las olimpiadas en el mes de enero. Tanteo al Madrid la posibilidad de contar con los tres brasileños, que a la postre irán a Tokyo 2020, pero por Rodrygo y Militao el Madrid fue tajante: no había opción. Por Vinicius Florentino abrió la puerta: le pueden venir bien minutos y confianza.

Pero ahora Zidane se niega a dejarle salir. Con Bale entre algodones y Hazard lesionado Vinicius ha saltado al 11 como un gato sobre un árbol. Y no quiere bajarse. Mandarle con Brasil 3 semanas en enero sería perderlo durante un tiempo que ahora Zizou ve inasumible.

Falta por ver la respuesta final del club. Pero Brasil lo tiene más difícil que hace dos semanas donde el brasileño era prescindible. Cosas del fútbol.