Xavi, aterrado: De Jong se queda y el tortazo de 2023 es Gavi, adiós

Si la directiva no obra un milagro en los próximos meses, su salida será oficial

Xavi, aterrado: De Jong se queda y el tortazo de 2023 es Gavi, adiós

Gavi es uno de los jugadores más prometedores del planeta, pero también uno de los jugadores que aún no tiene resuelto su futuro deportivo a largo plazo. El centrocampista andaluz del FC Barcelona siempre ha manifestado estar muy a gusto en la Ciudad Condal, pero finaliza contrato el próximo 30 de junio de 2023 y Joan Laporta no ha estrechado aún lazos con el canterano de La Masía para acordar una renovación.

Esto, como es obvio, ha generado que muchos equipos de Europa estén dispuestos a incorporar a Gavi el próximo verano con una oferta salarial que el conjunto catalán no pueda igualar. El alto desembolso realizado por el club en los últimos meses dificultará mucho cerrar otras operaciones de alto calibre y aquí es donde Xavi Hernández sabe que podría perder a uno de sus intocables.

A pesar de haber logrado que Frenkie de Jong permanezca en el Camp Nou, futbolista cuya continuidad se presentaba utópica, sabe que el andaluz podría protagonizar el gran revés del próximo verano, especialmente porque todos en Can Barça son conscientes de las dificultades económicas de la entidad blaugrana.

Gavi

Como se ha mencionado previamente, cada vez son más los equipos que están vigilando de cerca la situación de Gavi, pero hay tres que, en especial, están muy decididos a asestar el gran golpe a la parroquia culé: Bayern Múnich, Manchester United y Liverpool. Todos estos clubs vienen dejando patente en los últimos años que se encuentran en una buena situación financiera y aquí es donde el jugador de 18 años podría verse atraído por la posibilidad de dejar Can Barça.

Es cierto que el sevillano siempre ha dejado claro su deseo de triunfar con la elástica blaugrana, pero también es consciente de que sus prestaciones sobre el terreno de juego están siendo muy destacadas y quiere aprovechar esto para imponer unas exigencias muy ambiciosas en el que sería su nuevo contrato: por un lado, que sea a largo plazo, es decir, que se extienda hasta 2026 como mínimo; y, por otra parte, que su sueldo neto por campaña ronde los 8 millones, una cantidad que el conjunto alemán y los dos clubs españoles podrían asumir sin mayores dificultades.