Zidane tiene una doble arma secreta: LaLiga y la Champions pasan por ellas
Ojo a la estrategia del míster
El Real Madrid está obligado hoy a ganar en el Alfredo Di Stéfano de Valdebebas a un rival siempre incómodo, tanto en casa como en Mestalla, como es el Valencia si quieren, los blancos, seguir la estela impoluta de un FC Barcelona que sigue jugando a lo mismo y con la misma suerte: es decir, no juega bien pero gana, que es lo que cuenta. Y Zinedine Zidane va a jugar en este choque y los venideros una doble arma secreta definitiva que debe ser clave en LaLiga y la Champions League. Siempre lo ha sido.
Y esta no viene de Karim Benzema. Ni siquiera de la conexión del francés con Eden Hazard o con Marcelo. Tampoco de los goles milagrosos de Sergio Ramos o el dominio en la posesión con el trío clásico de la medular Kroos-Modric-Casemiro. No. La clave en el esquema de Zizou siempre fue la misma, más aún en una competición tan ultra concentrada como la actual competición doméstica española o el próximo final de la máxima competición continental, que arrancará en agosto. Y esa son las bazas de Isco Alarcón, Marco Asensio y lo que representan.
Son la cabeza visible de la segunda línea. Ambos han sido clave en la consecución de los títulos en los últimos años, ellos y el revulsivo del banquillo que encabezan. Es cierto que no disputaron minutos ante el Eibar, pero van a ir tomando protagonismo hasta que, como suele ocurrir con ambos, terminen siendo -si no titulares, que en el caso de Isco suele serlo- trascendentales para el equipo. Su frescura ha de dar alas al Madrid en los tiempos de máxima batalla.
De hecho el malagueño ha jugado en las cuatro últimas finales de Champions ganadas por el Madrid, siendo parte del once en dos de ellas, ante el Liverpool y la Juventus de Turín. Por su parte, Asensio dispuso de minutos en las dos últimas, ante los italianos e ingleses, dejando un gol en la goleada frente a los bianconeri (4-1). Dicho de otra forma, para Zizou son fundamentales y ambos aseguran trofeos, tanto que han patentado una celebración conjunta ya mítica para los hinchas merengues.