Zinedine Zidane y Koeman acertaron rechazando a este crack de moda
Estuvieron peleando por llevárselo
Dominik Szoboszlai era el último talento sacado del Red Bull Salzburgo, que había logrado atraer el interés de varios de los mejores clubes del continente. Igual que hicieron Takumi Minamino, Erling Braut Haaland, Kevin Kampl, Naby Keita o Sadio Mané, esperaba dar el salto a un equipo ‘top’, y así lo hizo. Tras una buena fase de grupos de la Champions League, en la que su equipo casi logra la clasificación, y dio pelea al Bayern de Múnich y al Atlético de Madrid de Diego Pablo Simeone, firmó por el RB Leipzig.
Tenía otras ofertas, de conjuntos de la talla del Arsenal de Mikel Arteta, el Liverpool de Jürgen Klopp, el Borussia Dortmund, o, incluso, el Barça y el Real Madrid. Todos se interesaron por este interior o mediapunta de apenas 20 años, que reúne unas condiciones soberbias. Es rápido, fuerte, alto, potente, técnicamente bueno, y, su gran especialidad, es el golpeo a balón parado. Para muchos, ahora mismo es el mejor lanzador de falta de todo el planeta.
Pero al final fue el equipo que dirige Julian Nagelsmann el que aprovechó la afiliación que tiene con los austríacos para convencer al internacional húngaro. Y poco más de 20 millones de euros fueron suficientes para llevárselo a la Bundesliga. El problema es que, a día de hoy, un mes y medio después de su aterrizaje y su presentación, todavía no ha podido debutar. Está lesionado de los aductores, y no se atreven a poner una fecha para su regreso.
Hay medios que ya especulan con un posible paso por el quirófano, lo que le llevaría a estar aún más meses de baja, e incluso correría el riesgo de perderse lo que queda de curso. En el Red Bull Arena están sumamente preocupados, y esperan que Szoboszlai vuelva lo antes posible. Ronald Koeman y Zinedine Zidane, pues, acertaron rechazando su posible llegada, aunque fuera por otros motivos. Pero, por suerte, se han librado de un ‘pufo’.
Ya tienen recuerdos pésimos, uno, por culpa de Ousmane Dembélé, y otro, por culpa de Eden Hazard. No quieren a más cracks con tendencia a lesionarse.
Por muy bueno que sea.