Ni CR7, ni Messi; ni Vini, ni Mbappé: Brasil y Arabia suspiran por el galáctico del PSG tras 7 meses

Los ojos de la canarinha, como del fútbol de la liga emergente solo tienen un campo de visión

Ni CR7, ni Messi; ni Vini, ni Mbappé: Brasil y Arabia suspiran por el galáctico del PSG tras 7 meses

Ni siquiera Vinicius Júnior, el jugador que acabó la temporada de clubs por encima del resto de futbolistas del mundo, como candidato máximo al Balón de Oro, ha cambiado el aciago destino de una selección de Brasil que lleva más de 20 años sin ganar un Mundial (2002, tiempo que para la canarinha es un mundo), que se la ha pegado otra vez en un gran torneo (tras la Copa del Mundo de Qatar 2022) y que, como no, espera el regreso de su ‘verdadero’ 10.

Ahora o nunca

Si nos preguntaran a nosotros, quizá no diríamos nunca pero sí dejaríamos las esperanzas en algo cercano a ello con Neymar Júnior en lo que respecta a ser la esperanza de la selección más laureada de todos los tiempos, en ser la esperanza del mejor equipo de Arabia Saudí ¿Por qué? Hay muchos motivos, pero su lesión, las señales que envía a nivel extradeportivo, su silencio en su recuperación, su edad…

Sin embargo, la caída estrepitosa en esta Copa América tras un Mundial desastroso hace que Brasil no pueda menos que esperar que Neymar regrese y le quite el 10 a Rodrygo Goes, que en verdad aún no se lo ha ganado. Tan acostumbrados a los éxitos, a la magia, a las victorias y, casi siempre, a ser muy competitivos, en Brasil miran los 7 meses que lleva Neymar de recuperación como la gran luz al final del túnel, como la estrella del futuro a corto plazo.

Ahora bien, si planteamos el ahora o nunca es porque el jugador ha tenido una intensa actividad extradeportiva durante esta recuperación, no hay plazos en el Al Hilal sobre su regreso, sus 32 años hacen que este tipo de lesiones sean más delicadas y su larguísimo historial de lesiones hace que se quiera ir con mucho cuidado con el genial futbolista brasileño. Y además de todo esto está el mismo Neymar, un jugador que no va a renunciar a su ‘otra vida’ además del fútbol. Hasta este momento, este séptimo mes de convalecencia lo hemos visto entrenando, sí, pero también jugando al póker, el golf, de fiesta, apoyando a Brasil en Estados Unidos pero nada de una fecha de regreso. Y en Brasil la espera está siendo horrible, aunque para el ex del Paris Saint-Germain, para el jugador más caro de la historia del fútbol, para la Saudi Pro League, para Neymar, este es el último tren del crack.