La sentencia para Mbappé de Al-Khelaïfi la firma Lucho: fichaje bestial, 2x1 y traición en Francia

Es curioso como en el culebrón Kylian Mbappé, en París se van sumando etapas, aunque con un destino incierto, como si estas no fueran en sus consecuencias con el conjunto francés, que se ha creído su propia versión del relato obviando la realidad. Prueba de ello es su último movimiento en el mercado, que firma Luis Enrique, como petición, junto a Nasser Al-Khelaïfi, que se carga a dos integrantes de la plantilla y que supondría la sustitución total del 10 de les bleus y también del mismo brasileño, pero como si estos ya fueran parte del pasado, cosa que no ha ocurrido.

Los dos siguen en nómina

Decimos que es curioso porque el PSG está presionando mediática e institucionalmente a sus dos estrellas, Mbappé y Neymar, con salir, incluso está fichando para sustituirlos -prueba de ello son Ousmane Dembélé, Gonçalo Ramos y ahora Kolo Muani-, pero no se ha asegurado tal cosa. Es decir, el 7 y el 10 se siguen llevando gran parte del peso de la masa salarial del equipo, ambos tienen contrato en vigor y difícil salida; luego, los movimientos pueden enquistársele al equipo francés, incluso este último.

Luis Enrique: "Este año Neymar tendrá más protagonismo"

Neymar ha sido suplente en los 3 partidos de pretemporada del PSG, no estando Messi y Mbappe apartado..pic.twitter.com/beoHOQ6Ac1

— AnaDeportes (@Ana_deportes) August 1, 2023

El movimiento, el 2x1 del que hablamos y que supone casi una traición en el seno de la selección francesa contra el crack de Bondy, es el posible fichaje de Kolo Muani, compañero de Mbappé en Francia, por parte del PSG a cambio de Renato Sanches y Ekitike, que servirían para abaratar en extremo el traspaso. Con ello, el PSG tendría tridente y, por cierto, problema latente para Marco Asensio, que formarían Dembélé, Ramos y el mismo Muani.

Sin salida

Ahora bien, salvo que el Al Hilal ponga en marcha su oferta de 150 millones de euros por Neymar y el Madrid haga lo propio con Mbappé, ambos jugadores son, a efectos prácticos, jugadores de la plantilla gala y, por tanto, piezas con derecho a su salario, pagado por el club francés. Sucede, por tanto, algo así como la confirmación de que existe un órdago que ya está imponiendo el PSG a sendas estrellas, pero que golpea por ahora contra un muro de verdad. Por ejemplo, lo cierto es que el movimiento por Muani no hace que el Real Madrid se mueva un ápice de su postura; es más, acrecienta su modus operandi con el astro francés: no harán una locura económica por un jugador que saldrá gratis en 10 meses. El PSG ficha, y mucho, echa balones fuera con Mbappé y Neymar, de ahí lo de Muani, pero sigue con el problema en casa. Y este puede ser asfixiante.