Llegó al PSG para mejorar a Sergio Ramos, pero Luis Enrique indigna a Al-Khelaïfi y lo echa de París

El central nunca acabó de convencer al técnico asturiano

Llegó al PSG para mejorar a Sergio Ramos, pero Luis Enrique indigna a Al-Khelaïfi y lo echa de París

El mercado de verano de 2023 fue un periodo donde el PSG se hartó de fichar. Y es que, con las salidas de jugadores como Leo Messi, Neymar o Sergio Ramos, en el conjunto parisino preparaban un cambio generacional que iba a ser liderado por Mbappé una serie de jugadores que llegaron en ese mismo mercado. Como relevo de Sergio Ramos, Al-Khelaïfi apostó fuerte por un Milan Skriniar que llegó a coste cero  cobrando un gran sueldo. Siendo, el eslovaco, una apuesta que ha resultado completamente fallida, al ser uno de los cuatro jugadores mejor pagados de la plantilla.

Skriniar

Y es que, pese a haber llegado con el cartel de ser uno de los mejores zagueros de toda la Serie A, la realidad es que Skriniar nunca llegó a gustar a un Luis Enrique que no está nada satisfecho con él. Y es que, pese a no haber dicho nada públicamente, el hecho de ver que apenas ha jugado 111 minutos en toda la temporada, es un claro indicativo de que las cosas no van bien con un Skriniar al que en La Gazzetta dello Sport ya sitúan cerca de la Juventus. 

Vuelta a la Serie A para escapar de Luis Enrique

Pese a haber cambiado por completo la identidad al PSG, que ha pasado de ser un álbum de cromos a un equipo serio y cohesionado, la realidad es que el carácter de Luis Enrique todavía entronca con algunos jugadores. Especialmente con aquellos a los que no da bola. Y es que, ni el propio Skriniar sabe las razones que llevan al asturiano a dejarlo constantemente en el banquillo. Una decisión que a sus 29 años, el eslovaco no puede permitir que siga sucediendo, pues se encuentra en la parte más alta de su carrera deportiva.

Así pues, entre el disgusto de Skriniar y la indignación de Nasser Al-Khelaïfi con una apuesta fallida tan cara, Luis Enrique no ha dejado a nadie satisfecho con la decisión, esta temporada, de dejar de contar con un Milan Skriniar que podría tener las horas contadas en París, donde si decide continuar sabe que lo hará sumido en el ostracismo del banquillo del Parque de los Príncipes