Luis Enrique le da las llaves del PSG junto a Dembélé y Fabián y en Valdebebas avisan del fiasco
Las puertas de la titularidad y la responsabilidad se le abren de par en par al exjugador blanco
Los números acompañan, también el ambiente y por supuesto la calidad y el potencial, por eso Luis Enrique confía ciegamente, casi al nivel de apoyo que muestra sobre Ousmane Dembéle y Fabián Ruiz, en Marco Asensio, quien ahora se está beneficiando de un contexto muy favorable en el Paris Saint-Germain, uno que le puede dar las llaves del equipo o, como creen algunos en Valdebebas, decepcionar al club galo tal y como hizo en la capital de España, tanto en la Ligue 1 como en la Liga de Campeones.
¿Cambio de rumbo?
Es verdad que el Real Madrid nunca dio a Marco Asensio, sobre todo tras su grave lesión de rodilla, la confianza de la titularidad, cosa que sí le está dando Lucho en París, pero también es cierto que las pocas veces que el balear tuvo la opción de ser uno de los elegidos para el once de gala blanco, la desaprovechó. Es una historia recurrente en el Madrid, por eso uno y otro, el jugador y la entidad merengue, se desengañaron con su unión y rompieron el lazo.
Los números están ahí
También hay que decir que poco o nada se le puede reprochar a Marco Asensio en el inicio liguero con el PSG, donde ha sido titular en los cuatro partidos disputados por el club francés -cuatro victorias- y donde ha dado dos asistencias y ha anotado un gol. Es decir, los números acompañan. También lo hacen las circunstancias y la confianza de Luis Enrique, esa que nunca tuvo en Madrid, ya que tras la lesión de Gonçalo Ramos el míster renunció a fichar, dándole la opción al insular de ser el falso nueve que busca el preparador asturiano.
Belle victoire, équipe 💫❤️💙 pic.twitter.com/J2qEysFSut
— Marco Asensio (@marcoasensio10) September 14, 2024
Paso al frente, regularidad
Y todo esto nos lleva al momento actual, donde el PSG post-Mbappé busca su identidad, siendo Asensio, como miembro del once junto a El Mosquito y el ex de Nápoles y Betis, clave. Y ahí viene la suspicacia blanca con respecto al futbolista zurdo: cuando hubo de ser cabeza de cartel en el Bernabéu, cuando debió dar un paso al frente, Asensio se escondió o no halló la regularidad. ¿Pasará lo mismo en París?