Mbappé acelera los tiempos y tritura a Nasser Al-Khelaïfi: recta final
El fichaje del francés por el Real Madrid alcanza el punto de no retorno, está casi hecho
Algunas voces en Francia, otras en España, aseguran que la eliminatoria de la Champions League entre Real Madrid y Paris Saint-Germain en general y el partido de vuelta en el Santiago Bernabéu en particular tenían un peso específico importante en la decisión de Kylian Mbappé de seguir en París o marcharse al final de temporada al club merengue; él aseguró siempre que no era así. Nunca lo sabremos, ya que la remontada histórica de los madrileños ha dejado a un paso de hundirse al barco francés, precipitando los acontecimientos con su número 7.
Es más, Kylian Mbappé ya ha acelerado en los tiempos que le separan desde un calendario intrascendente en la capital de Francia, al término de su contrato, en junio; o lo que es lo mismo: de su situación actual, a la firma con el Real Madrid, su manido sueño de la infancia. Y el adiós del 7 de Bondy no podría llegar en peor momento para el club galo, pero sobre todo para un Nasser Al-Khelaïfi que ya, desesperado, incluso empieza a señalar a sus grandes apuestas: Neymar, Messi o Sergio Ramos.
Con el proyecto faraónico parisino a un paso de estrellarse, si no lo ha hecho ya, Mbappé prepara el golpe definitivo. No va a renovar, va a rechazar todas las ofertas de su equipo y, muy probablemente, acordará su nuevo contrato con el Madrid antes de que acabe el curso, posiblemente en las próximas fechas. De modo que ese estilete definitivo de Mbappé contra el PSG y Al-Khelaïfi ya está en marcha y tiene nombre: silencio.
Posiblemente el PSG a lo largo de este largo culebrón tuvo opciones de retener al crack parisino, pero eso fue hace mucho tiempo, cuando el club le dio los galones del joven delantero a Neymar Júnior. Mbappé ha cultivado su sueño por el Madrid desde el segundo lugar que siempre ha ocupado en el club francés, uno al que le habían desterrado jugadores que no se lo han ganado sobre el césped, como el propio jugador brasileño o ahora el argentino. Pero eso es ya historia, Mbappé tomó su decisión hace tiempo y el arma escogida, ese silencio mantenido, es una trituradora para Al-Khelaïfi, que va a perder algo más que al mejor del mundo con su marcha, que se hará oficial antes de la próxima ventana de fichajes estival.