Mourinho y su vuelco al PSG: nuevo 10 por Messi, nuevo rol de Mbappé y Sergio Ramos, y un fichaje
El entrenador portugués querría un PSG más profundo y rocoso en fase defensiva
Uno de los grandes problemas que ha tenido al Paris Saint-Germain de Christophe Galtier ha sido su tridente, formado por Neymar Júnior, Kylian Mbappé y Leo Messi, porque a pesar de lo que pueden ofrecer en ataque, su falta de intensidad física le ha generado muchos desequilibrios al equipo galo en la presión sobre el rival, especialmente ante equipos con capacidad para salir jugando. Además, el PSG no ha sido un equipo capaz de sujetar el esférico por una grave carencia, la de poseer varios organizadores de nivel. Por todo ello, el nuevo equipo que formaría en el Parque de los Príncipes José Mourinho, máximo candidato al banquillo del equipo francés, sería dar un vuelco a la idea de juego parisina.
Liberados lo que menos van a sacrificarse para que creen
Vaya por delante que si The Special One llega a ser entrenador del PSG todos los jugadores del equipo van a correr. Ahora bien, sabe Mou que Neymar y Mbappé son menos propensos a los alardes defensivos y los grandes esfuerzos en esa dirección, lo cual, en cierta forma, no rompe su tesis de juego. Mou podría formar con una estructura ultradefensiva sobre la pizarra, que en el fondo sería todo lo contrario, o lo que es lo mismo, en el fondo pretende favorecer a Mbappé y Neymar desde la contundencia defensiva y la profundidad ofensiva.
Nuevos roles
Así, Mbappé cambiaría su posición en la banda para hacer de referencia arriba, pero no fija, sino movible por toda la franja de vanguardia. Tras él estaría el 10 real, no Messi, sino Neymar, que haría de media punta, a caballo entre el centro del campo y el ataque, y ya por detrás habría tres centrocampistas apoyados por dos largos carrileros, donde incluso Marquinhos o Sergio Ramos podrían hacer de vértice en el triángulo si este es defensivo, un triángulo donde Verratti sería fijo y Mourinho haría una incorporación creativa de cara a la ventana de transferencias, ya que ni Soler, ni Fabián, ni Vitha le convencen. De todo ello nos sale un claro 3-1-4-1-1 en fase de ataque; es decir, un equipo con mucha presencia en campo rival y sobre la zona de construcción del juego.
Lo ideal para Mourinho es que sus carrileros sean tan poderosos en lo físico como virtuosos en el desborde a la hora de sumarse al ataque, mientras que el organizador que pretende de cara al mercado de fichajes debería ser muy del perfil del mismo Verratti, capaz de tener un rigor defensivo enorme y, a la vez, ser talentoso para sacar la pelota desde atrás.