Para llorar y no parar en Barcelona.¡Depay llama al PSG!
Parece que en la ciudad condal las cosas siempre pueden ir a peor
¡No levanta cabeza! Tras la ya conocida marcha de Lionel Messi y la más que probable de Luis Suárez, el presidente del FC Barcelona, Josep María Bartomeu, soñaba con una reconstrucción que todavía algunos aficionados culés están esperando a ver comenzar.
En este caso ha sido el delantero holandés Memphis Depay el que ha dado portazo a las intenciones del club blaugrana por incorporarlo. Mucha culpa tiene de ello el Paris Saint Germain, que se ha metido en la puja por el ariete tras conocer su deseo de abandonar su actual club, el Olympique de Lyon.
Los motivos son más que evidentes: se trata de un jugador joven que tiene mucho fútbol en sus botas y, pese a que el club francés le dio la oportunidad cuando estuvo casi un año apartado del Manchester United, el holandés tiene hambre de títulos y sabe que quedándose en Gerland es difícil que alcance alguno, pese a que este año lograron la Copa de la Liga de Francia tras vencer al Paris Saint Germain en los penaltis.
Es precisamente el equipo de Tuchel el que ha aumentado su interés en las últimas horas por el jugador holandés y éste, como no podía ser de otra forma, se ha dejado querer. El gran perjudicado en todo esto es el FC Barcelona que, tras la negativa de Lautaro Martínez y la marcha de Luis Suárez, el puesto de delantero ha quedado vacante a tan solo diez días del comienzo de la liga.
Las cifras del traspaso de Memphis Depay rondarían los 50 millones de euros, una cifra bastante razonable si tenemos en cuenta que el jugador aún tiene 26 años y ha anotado nueve goles en los trece partidos que ha disputado en la Ligue 1 este año, ya que se ha perdido gran parte de la temporada por una rotura del ligamento cruzado anterior en su rodilla izquierda.
Pese a eso, la calidad que atesora en sus piernas es innegable y, con la confianza y la regularidad que siempre le ha faltado, puede brindar muchos años de buen fútbol en el Parque de los Príncipes. De esta forma, el FC Barcelona tendrá que seguir buscando un recambio de garantías que pueda acercarse a las cifras goleadoras de Luis Suárez, aunque el meollo en el mercado no está nada fácil. Muchos equipos no venden y, si lo hacen, es a cambio de cantitades desorbitadas.