¡Sergio Ramos le convence! El crack del Madrid que negocia con el PSG

Sigue el tira y afloja entre el Real Madrid y el Paris Saint-Germain. Florentino Pérez desea vengarse del jeque por haberse llevado a Sergio Ramos, y a coste cero, y por eso tiene entre ceja y ceja a Kylian Mbappé. Obviamente, el principal motivo es deportivo, pues necesitan a un atacante con facilidad para ver puerta, pero también juega una baza importante el factor de la venganza. Pero todavía puede salir perdiendo, y por goleada, viendo los últimos rumores.

Para empezar, el precio que han puesto al ex del AS Mónaco es una burrada, ya que rondaría los 200 millones de euros, lo que dificulta todo. Y, según informan, ahora Mauricio Pochettino habría exigido la contratación de otro crack que está en la plantilla de Carlo Ancelotti. Porque no oculta que Casemiro es de su total agrado, y le encantaría tenerle en su plantilla. Para ello, renunciaría al fichaje de Eduardo Camavinga, que estaba completamente cerrado, procedente del Stade Rennais.

De hecho, en Francia señalan que no es ninguna utopía que el internacional brasileño entre en la operación que lleve al campeón del Mundial de Rusia en 2018 a La Liga Santander. Todas las partes parecen estar por la labor, incluido, el centrocampista sudamericano, que se mostraba algo dubitativo. Pero, viendo el contrato que le ponen sobre la mesa, en el que vería como su sueldo se multiplicaría por dos, parece que se le han despejado las dudas.

Además, Ramos y Keylor Navas, dos ex compañeros con los que guarda muy buena relación, han hablado con él para convencerle. Y, viendo el proyecto que hay en el Madrid, que no está ni entre los cinco candidatos a ganar la Champions League, y el que hay en el Parque de los Príncipes, no hay color. Así pues, a estas alturas no se puede descartar absolutamente nada. El único factor que juega en contra de los intereses de todos es el tiempo.

Menos de una semana queda para que el mercado cierre sus puertas, y finalicen los periodos de inscripción. Más vale que se den prisa.

De lo contrario, todo quedaría suspendido.