James Rodríguez está desesperado con esto ¡Zidane no se lo cree!

El secreto del colombiano deja estupefactos a los responsables del Real Madrid

James Rodríguez está desesperado con esto ¡Zidane no se lo cree!

Los capítulos de Gareth Bale y James Rodríguez en el Real Madrid de Zinedine Zidane comienzan a ser tan numerosos como surrealistas. Los unos, los del galés, mucho más que los otros, los de colombiano, pero ambos tienen tan perdidos a los aficionados merengues como al mismo entrenador del cuadro blanco.

Zidane no sabe si quieren seguir en el club, marcharse o ambas cosas a la vez. Ambos han apuntillado en sucesivas ocasiones ambas posturas, aunque sobre todo la primera, sin embargo sus pasos no reafirman su posición en un equipo que va al alza sin ellos y en el que cada vez les va a ser más difícil encontrar un sitio.

Gareth Bale y James Rodríguez

En el caso del cafetero, esta temporada comenzó con la confianza del míster galo pero su rendimiento ha ido claramente de más a menos y ahora su situación, tras su misteriosa lesión y rápida recuperación para las citas del combinado nacional sudamericano, es más precaria: le ha adelantado en la rotación Isco Alarcón y tiene por delante al triunvirato histórico (Modric, Kroos y Casemiro) y a un hipotético fichaje invernal. Asimismo, su ritmo e intensidad en los entrenos de James con Colombia han dejado a Zizou perplejo y algo mosqueado con su actitud. Y James sabe que el Madrid piensa en él como una opción de salida de cara a las ventanas de fichajes.

Sin embargo James tiene un plan para reconquistar el corazón de Zidane: quiere dar el máximo en sus citas con la cafetera -ante Perú, en Miami, y Ecuador, en Nueva Jersey-, demostrar que su calidad aún puede ser muy útil al Madrid y que él quiere ser parte activa del club de Concha Espina. Los próximos días, sobre el terreno de juego, y semanas, dentro y fuera del campo de entrenamiento y el césped en competición, serán cruciales para ver si la relación entre el entrenador francés y el enganche zurdo se tensan y se rompen o, por el contrario, se toman una tregua y vuelven a la fraternidad.