Los dos grandes cambios que sufrirá el fútbol en 2026
Gianni Infantino espera llegar a un acuerdo para el nuevo calendario mundial
Lo que ahora se llama fútbol moderno, denominación que hace referencia a lo que ha cambiado (y lo que se ha mercantilizado) este deporte creado en la segunda mitad del siglo XIX en Inglaterra, será fútbol viejo en tan solo 5 años. La FIFA y sus grandes jerarcas, los que toman las decisiones que afectan a como y cuando vemos fútbol el resto de mortales, se reunirán el próximo lunes 20 de diciembre para reorganizar el calendario del fútbol a partir de 2026. Casi nada.
El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, ha dejado clara la postura del organismo mundial y, aunque se muestra abierto a escuchar críticas y propuestas de mejora, tiene claro que con la organización actual el fútbol se muere. Es por ello que la FIFA ha lanzado dos grandes propuestas:
- Celebración de un Mundial cada dos años en lugar de cada cuatro. Con esta medida la FIFA pretende eliminar partidos entre selecciones intrascendentes y ampliar el número de grandes duelos al aumentar la frecuencia de mundiales.
- Reunificación de partidos de selecciones de las fases de clasificación. La FIFA pretende eliminar las ventanas de septiembre, octubre y noviembre además de la de marzo para unificarlo todo en un único mes de competición, que sería octubre, o en dos quincenas, una en octubre y otra en marzo.
Ante estos cambios, organizaciones como la UEFA se han apresurado a afirmar que no aceptarán tales medidas puesto que afectarían a sus competiciones (Eurocopa sobre todo) y mermaría enormemente sus ingresos. También la CONMEBOL y el Comité Olímpico Internacional se han mostrado contrarios a dichos cambios.
A menos de dos meses para la celebración del Congreso Mundial de la FIFA, el debate está más que servido y ahora tan solo falta posicionarse en uno u otro bando. Si finalmente las dos nuevas medidas que la FIFA defiende se aprueban, comenzará una guerra sin precedentes entre organismos deportivos (la UEFA ha adelantado que boicotearía los mundiales) que nadie sabe hasta donde conduciría.
Lo que si parece cada día más evidente es que el fútbol moderno, tal y como lo conocemos hoy, tiene los días contados.