Ni Pedri se salva en España ante Japón: 4 cambios fijos ante Marruecos
El seleccionador vio hundirse su idea y no repetirá errores... ni ciertos jugadores
De momento, Luis Enrique ya ha leído la cartilla al equipo sobre el viejo mal que aqueja a una selección, la española, que mueve y maneja el esférico como pocas, pero que adolece de una falta de contundencia y una fragilidad defensiva que no la permite colgarse un cartel de máxima favorita, como sí los son Brasil y Francia. Ayer, ante Japón, Lucho volvió a convencerse de eso y con solo dos jugadores dando la talla de su once (si cabe tres), habrá cuatro cambios frente a Marruecos.
El partido de octavos -ya no por el lado del cuadro que mira a la pentacampeona y Argentina, sino el que emplaza hipotéticamente a los españoles con Cristiano Ronaldo y, después, con Kylian Mbappé o la Inglaterra de Jude Bellingham- frente a Marruecos (martes 6 de diciembre, 16.00, hora española) será diferente, en los elegidos de inicio y en el planteamiento. Y lo será porque ya será a vida o muerte, de eliminatoria pura y dura, de modo que no caben para Luis Enrique errores como los cometidos ante los nipones.
El primero de todos, la relajación colectiva, que le pudo costar la eliminación a La Roja, pero luego fallos individuales inadmisibles. De los que se salvaron del once, solo hay dos seguros y uno probable, que repetirán frente a los marroquíes. Rodri y Morata cumplieron sobre el césped, uno fue el más claro en la salida de balón y el más contundente frenando a los delanteros asiáticos; el otro marcó, otra vez, y fijo a la defensa rival. Más no se le puede pedir. Podría haber un tercer hombre que se salvase en Dani Olmo, que estuvo errático, pero lo intentó, se movió por todo el campo y creó peligro. También salvaríamos a César Azpilicueta, pero se lesionó y será duda ante Marruecos.
Y partir de ahí vienen los señalados, que muchos, como decimos, repetirán. Los tres del centro del campo tienen margen, aunque ya escaso, básicamente porque estuvieron mal. Busquets, Gavi y Pedri, por ese orden descendente de mejor a peor, no aportaron ni claridad ni velocidad de circulación, erraron pases sencillos y se les vio fatigados. Balde estuvo en las dos fotos de los goles japoneses y dejará su puesto a Jordi Alba, mientras que Pau perdió gran cantidad de balones y volvió a deshacerse al espacio, pareciendo y siendo lento y sin reacción. Y Nico Williams estuvo de nuevo inoperante, sin capacidad de desborde, sin espacio para hacerlo, uno que tampoco se buscó. De modo que Luis Enrique volverá al plan inicial (el de Costa Rica), con la única duda de Carvajal y el lateral del Chelsea, ya que si el segundo no está listo jugará el del Real Madrid, que, dicho sea de paso, está haciendo un Mundial muy discreto. Por último y ahí tampoco habrá cambios, el partido de Unai Simón fue también para olvidar, erró en el primer gol, tanto en el despeje como en la intervención y no aportó tranquilidad en momentos de zozobra.