¡120 millones sobre la mesa! Guardiola da un ultimátum al jeque

Está al caer. El central senegalés del Nápoles, Kalidou Koulibaly, está muy cerca de cerrar su traspaso al Manchester City por una cantidad cercana a los 120 millones de libras. Pese a que se trata de una suma desproporcionada para un central, el equipo inglés necesita reforzar a toda costa ese hueco que tiene en la zona defensiva.

¡Está harto! La eliminación de forma inesperada frente al Olympique de Lyon en la última edición disputada de la Champions League ha provocado que el entrenador catalán del Manchester City, Pep Guardiola, haya exigido al jeque árabe del club la llegada inminente de varios jugadores que refuercen la plantilla del equipo. Una de las peticiones expresas es la de un central de garantías como es Koulibaly o, en su defecto, el brasileño del Sevilla, Diego Carlos. 

Éste último tiene una oferta muy ambiciosa también desde Liverpool y su llega a Manchester se antoja complicada por la cantidad de pretendientes que atesora el jugador. Por su parte, el senegalés de 29 años está ansioso por cambiar de aires y buscar un reto de mayor exigencia en su carrera. Con toda la experiencia del mundo en sus piernas y unas cualidades físicas verdaderamente imponentes, Koulibaly se ha mostrado muy receptivo para incorporarse al club que dirige Pep Guardiola.

Aunque en los últimos años el zaguero del Nápoles ha sonado para Real Madrid y Barcelona, actualmente ambos clubes españoles no están por la labor de desembolsar semejante cantidad por un central y es por ello que el camino se le ha quedado despejado al conjunto citizen. La derrota contra el Olympique de Lyon ha hecho despertar -aún más si cabe- el deseo de Guardiola de reforzar la plantilla a base de talonario e, incluso, varias fuentes aseguran que Messi estaría muy conforme con la tentadora oferta que le enviará el club inglés en los próximos días, una vez conocida su salida definitiva del FC Barcelona, aunque el presidente, Josep Maria Bartomeu, asegure que quiere retirarlo en el club.

De esta forma, el Manchester City podría armar una plantilla de lo más temible en los últimos años y, si finalmente llega el astro argentino, la cara de Guardiola volvería a sonreír tras un año en blanco a nivel de trofeos.