Arabia, Ten Hag y Pochettino formulan un fichaje único: por el otro Haaland, una cifra nunca vista

Arabia, Ten Hag y Pochettino formulan un fichaje único: por el otro Haaland, una cifra nunca vista

El jugador se deja querer, pretende salir y los dos clubs ingleses pueden hacer una locura

El infierno deportivo en el que se han sumido Chelsea y Manchester United en la última temporada y media -en el caso de los red devils puede hacerse extensible ese periodo a la práctica totalidad de la última década- ha hecho que sendos clubs expongan sus miedos realizando fichajes sospechosos por cantidades desproporcionadas que, en el mejor de los casos, no han mejorado el nivel del equipo. Pero la presión del fútbol de Arabia Saudí y la posibilidad de fichar al otro Erling Haaland es demasiado tentadora como para cortar ahora esa política de gasto, la cual, lejos de menguar, puede tener en apenas un mes la guinda.

Guiño y un lío más en un campeón herido

Todo lo bien que le fue al Nápoles la temporada pasada le va mal en esta, y su estrella, Victor Osimhen, no es sino un reflejo del cambio para mal de su equipo. Por eso el delantero africano empieza a desprender impresiones acerca de la posibilidad que tuvo de marcharse en verano al fútbol árabe, pero también se abre como no lo hacía antes a marcharse del gigante italiano, y eso es lo que pone en alerta a blues y red devils.

El nueve del cuadro napolitano decía en el podcast The Obi One Podcast: “tenía dos camisetas, una del Chelsea y otra del Manchester United", en u claro guiño a la Premier y a los dos conjuntos ingleses, mientras que, en la charla, el exjugador del Chelsea que pone nombre a ese espacio futbolístico le remarcaba que podía ser el nuevo Didier Drogba en Londres, algo que no desagrada al nigeriano. Y al United, como al Chelsea, le va la música en este aspecto: a los dos equipos les obsesiona tener un referente puro (Hojlund no es considerado como tal en Old Trafford) y Osimhen es de los mejores.

Pochettino

Es más, la campaña pasada se presentó al jugador del actual campeón de la Serie A como una de las pocas alternativas a los dos grandes referentes en esa demarcación en la actualidad, como son Erling Haaland y Harry Kane. La edad de Robert Lewandowski y la de Osimhen hacen que él y nadie más sea esa alternativa top: no en vano es el segundo delantero centro más caro del planeta, incluso por delante en tasación (Transfermarkt) del punta inglés. Eso sí, se atisba en la Premier que Chelsea y United podrían tratar de hacer este fichaje en enero, lo que convertiría al africano en el jugador más caro de la historia del fútbol en un mercado invernal: su precio no bajaría de 150 millones de euros, lo que supera los 135 que pagó en su día el Barça por Philippe Coutinho.