Bellingham y la Premier, en shock: la dimisión más triste en Liverpool por culpa del Real Madrid
La entidad cree que ha perdido la eliminatoria y con ello puede que al inglés, pero aún pueden caer torres más altas
Que el Liverpool llegaba a la eliminatoria ante el Real Madrid con el agua al cuello tras una temporada aciaga, es un hecho, pero que nadie en Anfield esperaba un resultado como el que se dio, que para Jürgen Klopp no es remontable -así lo dijo tras el partido-, es más que una certeza, de ahí que se quieran depurar responsabilidades, empezando por Mo Salah hasta llegar al mismo técnico, todo ello con una losa aún más gorda encima: Jude Bellingham.
Difícilmente, opinan ciertos analistas del equipo red, el jugador del Borussia Dortmund elegirá Anfield como su destino si la campaña que viene el equipo red no disputa la Liga de Campeones; al fin y al cabo, el crack está con el Dortmund a un paso de los cuartos de final de la Liga de Campeones tras haberse impuesto en el partido de ida al Chelsea de Todd Boehly y los 600 millones de gasto.
Pero más allá del internacional con Gareth Southgate, el Liverpool tiene más problemas. Entre los más críticos se pone el foco en la edad y las prestaciones de ciertos jugadores, entre ellos Mo Salah, que volvió a ser uno de los señalados. Entre estos últimos los críticos dispararon casi en todas las direcciones, tocando a Arnold, Henderson o el mismísimo Jürgen Klopp, que tiene contrato en vigor pero sobre el que ya se duda.
Un técnico muy apetecible
Es curioso como el mismo Klopp, que no ha sabido abordar desde su llegada a Liverpool los choques ante el Real Madrid, al que nunca ha ganado, está discutido en Anfield y a la vez es uno de los posibles sustitutos de Carlo Ancelotti si el míster italiano abandona el club, al menos uno de los que más gusta en Chamartín. De modo que esta temporada aciaga, la caída ante el Madrid y las dudas que genera el proyecto del Liverpool ya han sacado la guillotina y desde Salah a Klopp, nadie tiene su puesto asegurado. Los aficionados lo aclaran: hace falta una reinvención.
Por último, hay que añadir el que puede ser el bombazo de esta cadena de incertidumbres que sacuden al Liverpool: afirman ciertas voces que si el ruido crece y el míster no se ve con fuerzas de enderezar la nave, él mismo dimitirá al final de temporada. Las consecuencias de que Klopp se vaya de Anfield son tan monumentales que se explican solas.