Casemiro, Garnacho y Varane aceptan el próximo zarpazo del United en 2023, un crack de 55M
Los red devils están dispuesto a poner en marcha la operación
Es uno de los futbolistas más laureados de la Premier League, pero actualmente su labor en el Leicester City no se está viendo recompensada por los resultados del equipo y de ahí que James Maddison esté abierto a negociar un giro radical en su carrera el próximo verano. El mediapunta inglés de 26 años está considerado una de las grandes joyas de la competición y por ello el Manchester United está desenado que se reabra la ventana de transferencias para presentar una oferta en torno a 55M por el traspaso.
Tras cerrar operaciones en el último lustro tan ilusionantes como las llegadas al primer equipo de Raphael Varane, Casemiro, Jadon Sancho, Alejandro Garnacho o Antony Moraes, el proyecto de los red devils no termina de despegar y Erik ten Hag sabe que solo a base de talonario podrá plantar cara al resto de colosos de Europa.
De ahí que el técnico neerlandés haya trasladado a las oficinas del club su idea de disponer de Maddison la próxima campaña en sus filas para brindar una mejoría notable a una línea creativa que ha evidenciado un sinfín de problemas en el presente curso a pesar de la mencionada incorporación de Casemiro y de la presencia de Bruno Fernandes, otro mediapunta sumamente aclamado en el viejo continente.
Si ya el potencial económico del Manchester United y la predisposición de James Maddison a cambiar de aires suponen dos alicientes muy importantes para encarrilar la operación, en Don Balón queremos destacar las otras dos claves que marcan el futuro del futbolista británico.
En primer lugar, la finalización de contrato del futoblista con su actual equipo en 2024, algo que apremia la urgencia en el King Power Stadium por encontrar un nuevo destino para el jugador a sabiendas de que retenerlo hasta esa fecha se saldaría con una posterior salida a coste cero: la intención del club, a colación de esto, es rescatar en torno a 50 millones por su venta.
En segunda instancia también tendrá mucho que ver el futuro deportivo del Leicester ya que el equipo está en plena lucha por la permanencia y descender de categoría sería una noticia muy peyorativa en términos económicos, algo que obligará al club a desprenderse de sus mejores jugadores.