Destrozó a Zidane, se fue del Barça y Jurgen Klopp lo ata: Lukaku 2.0

Barça y Madrid no lo vieron venir: unos, los culés, porque le dejaron ir cuando estaba en su cantera (allí lo había metido su padre, Lilian Thuram, el legendario defensa francés que jugó en el Barcelona, la Juventus de Turín o el Mónaco, entre otros); los otros, los blancos, ayer, cuando le permitieron realizar dos remates al primer toque, que resultaron ser dos goles en contra para los de Zinedine Zidane. Pero el que sí ha visto su potencial, al nuevo Romelu Lukaku, es Jurgen Klopp que ya se interesó por el este pasado verano y le quiere para su Liverpool en la próxima campaña de la Premier League.

El delantero centro del Borussia Mönchengladbach Marcus Thuram fue una auténtica pesadilla para la zaga del Madrid en la tarde noche de ayer porque hizo todo aquello que quizá no tiene el cuadro blanco en su plantilla y que añoran de Luka Jovic, al que ficharon precisamente por eso: cuerpear con los defensas y robarles balones por alto o al espacio, aguantar segundas jugadas, hacer la guerra por su cuenta generando ocasiones pero sobre todo efectividad, gol, pegada.

Cierto es que el Madrid reaccionó sobre la bocina, eso sí con Thuram fuera del campo ya (fue sustituido en el minuto 70), pero el punta del cuadro alemán descosió a Varane y Lucas Vázquez, que no le detectaron, pese a su corpulencia, en los dos goles que anotó. Pero más allá de partido de Champions League frente al Madrid, Jurgen Klopp, entrenador del Liverpool, se interesó por él por todas esas características nombradas y que le pueden dar aire y recursos nuevos a los reds. Lo de ayer es solo una confirmación.

Se asegura desde Anfield que el Liverpool volverá a la carga por Thuram en cuanto se rearme económicamente y también que ha sorprendido su capacidad y calidad en el Real Madrid, que no esperaban ver al nuevo Lukaku en el conjunto germano. Si finalmente los ingleses consiguen hacerse con el futbolista francés de 23 años y 192 centímetros de estatura, sin duda el Liverpool será un equipo más fuerte, poderoso y peligroso. Thuram, el hijo, es todo eso: potencia, fuerza y pegada. Gran jugador.