Florentino da el OK… pero Mourinho ¡se niega!

La estrecha relación entre el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, y el actual entrenador del Tottemham Hotspur, José Mourinho, han reavivado las conversaciones sobre posibles intercambios de jugadores.

Gareth Bale, situado en el centro de dicho diálogo, es el jugador que parecía que iba a cambiar en primer lugar de aires para regresar al conjunto londinense, pero ahora el portugués… ¡no lo quiere!

La temporada del extremo galés del Real Madrid está siendo todo un despropósito y, salvando el primer mes de competición, su rendimiento está siendo lamentable. Ya el pasado verano a punto estuvo de marcharse a la Superliga China, pero finalmente no se cerró el acuerdo entre clubes.

Zidane, obligado por las bajas, decidió apostar por él y, pese a que parecía que iba a despegar de nuevo, el galés ha sido todo un chasco en estos tres meses. Florentino ya no le quiere ni ver y está dispuesto a dejarle ir por una cantidad que dista enormemente de lo que pagó hace cinco años por él.

Y cuando todo parecía hecho… ¡Mourinho ha dicho no! No le quiere, ni ahora ni en verano. El entrenado portugués tiene muchos jugadores de calidad en el equipo y la pretensión de Florentino era estrechar lazos con la venta del galés para incorporar alguna de las estrellas de los Spurs en el próximo verano o, incluso, en este mercado invernal.

Eriksen ha suscitado enormemente las ganas del presidente blanco para vestir la elástica madridista en las últimas temporadas y, pese a una primera tentativa en verano, finalmente no se formalizó el traspaso. Bale tiene la llave para la llegada de un megacrack y, si no el es danés en este mercado, dentro de seis meses Florentino irá a por todas por Harry Kane, Heung Min Son o Dele Alli.

Lo que está claro es el Gareth Bale se ha convertido en un quebradero de cabeza tanto para Florentino Pérez como para Zidane y su salida podría ser inminente hacia un destino de menor bagaje -ante la negativa de Mourinho- como China, Estados Unidos o Catar.