Florentino Pérez se siente traicionado ¡Elige a Mourinho! ¡Se va!
Sin previo aviso, la operación se cerrará en las próximas fechas
El Tottenham no está para muchos experimentos, solo los que le permita hacer José Mourinho, que ha llegado a Londres en calidad no solo de entrenador, sino de director deportivo. Los spurs no están pasando por un buen año, de hecho si a estas alturas la pasada campaña había un optimismo que terminó por refrendarse con la primera final de Liga de Campeones, que disputó el cuadro londinense ante el Liverpool, ahora están a veinte puntos del líder, los de Anfield, en la Premier League (34 de los reds, por 14 de los spurs).
En la Liga de Campeones por el momento les están salvando las ráfagas de calidad de su plantilla, pero no transmiten unas impresiones positivas sobre el terreno de juego. Tanto es así que están a cinco puntos del líder del Grupo B, el Bayern de Múnich, y tienen muy complicado ser primeros de grupo, algo que les llevará, a buen seguro, a un cruce complicado.
Pero Mou ha venido, en primera instancia, para cambiar radicalmente la cara de la regularidad en la liga. Los de la capital de Inglaterra deben revertir la situación y salir de los puestos de cola, tienen plantilla para ello. Sin embargo Mou ha hecho peticiones. La primera es la llegada de Ibrahimovic, ex del Barça y de Pep Guardiola. Cree que el sueco, pese a su edad, puede aportar un plus cuando se le necesite. La otra es un viejo anhelo del Real Madrid.
Y es que el Sporting de Portugal está obligado a vender a Bruno Fernandes y el Tottenham a hacerse con un centrocampista de calidad, que eleve el nivel de la medular y aporte competencia. Se ha pensado en Isco Alarcón y Dani Ceballos, aunque prevén que el Madrid elevará mucho el precio de sus salidas, mientras que Fernandes quiere ponerse a las órdenes de su compatriota y la necesidad del club portugués facilitaría su salida a razón de unos 60 millones de euros. Seguro que esto no gustará en el Santiago Bernabéu, ni a Florentino Pérez ni a Zinedine Zidane.