¡Frank Lampard corre peligro! El Chelsea ya piensa en su sucesor

El Chelsea se gastó un dineral este verano, y fichó jugadores de primerísimo nivel, que salieron muy caros. Ben Chilwell, Kai Havertz, Timo Werner, Edouard Mendy, Hakim Ziyech… todos ellos apuntalaron un proyecto en el que ya se encontraban N’Golo Kanté, Jorginho Frello o Christian Pulisic. Y, sin duda, se convirtió en uno de los equipos más interesantes a seguir esta campaña. Porque prometían dar mucha guerra en la Premier League.

Hay quienes les colocaban como la gran alternativa al Liverpool de Jürgen Klopp y al Manchester City de Pep Guardiola. Otros incluso iban más allá, y auguraban que serían uno de los huesos más duros de roer en la Champions League, competición que conquistaron en el año 2012. Pero la realidad es que, por el momento, Frank Lampard no ha logrado dar con la tecla, y no acaba de encontrar el once ideal. Y los resultados no son los esperados.

En la máxima competición continental arrancaron con un empate a cero ante el Sevilla de Julen Lopetegui. Y en liga, ocupan una decepcionante octava plaza, después de dos victorias, dos empates y una derrota en las cinco primeras jornadas. Hay rumores que ya apuntan a que Roman Abramovich estaría bastante disgustado, y si no logran enderezar el rumbo pronto, meditaría seriamente un cambio de entrenador en el banquillo ‘blue’.

Este fin de semana, enfrentan una dura prueba contra el Manchester United, otro conjunto que tampoco ha comenzado de la mejor manera. Y, si no vencen, y vuelven a hacer el ridículo, el técnico inglés podría ser destituido. Porque ya estarían en conversaciones con un posible relevo, Laurent Blanc, que estaría encantado de ponerse a las órdenes del Chelsea. Porque lleva sin entrenar desde 2016, cuando salió del Paris Saint-Germain.

El galo estaría tremendamente ilusionado ante la idea de aterrizar en Stamford Bridge, y volver a estar en activo. Como futbolista, ya jugó en las filas de los ‘red devils’, además de otros clubes como el Barça, el Napoli, el Montpellier, el Inter de Milán, el Auxerre y el Saint-Étienne. Como técnico, solo por el Girondins de Burdeos, con el que ganó una Ligue 1, y por la selección de su país.

Además del Parque de los Príncipes.