Guardiola se entera y no da crédito a la operación: era su apuesta

Cuando Pep Guardiola se ha enterado del asunto, ha puesto el grito en el cielo. Pedro Porro, el joven lateral diestro español, está llamado a ser un futbolista importante en los próximos años y por eso el City decidió pagar 12 millones de euros por él al Girona en 2019 cuando el extremeño tan solo contaba con 18 años.

Debido a su juventud e inexperiencia en el fútbol de élite, el City decidió ceder al chaval al Real Valladolid la temporada pasada con la intención de que se foguease en LaLiga a las órdenes de Sergio González. Sin embargo, las cosas no salieron como el City, Porro y el Valladolid querían y el internacional sub-21 terminó jugando mucho menos de lo esperado.

De ahí que, en esta segunda temporada de Pedro en el City, su club decidiese cederlo de nuevo, pero esta vez al Sporting de Portugal, un club que aspira cada año a hacerse con la liga y que esta temporada tiene toda la pinta de que lo logrará (saca 13 puntos al Oporto aunque con un partido más disputado). La temporada de Porro está siendo espectacular, es titular indiscutible en la banda derecha y ya lleva 3 goles y una asistencia en lo que va de temporada.

Por todo ello, Pep estaba entusiasmado con la marcha de su pupilo, a quien veía como pareja perfecta para Joao Cancelo en su banda derecha de cara a la próxima temporada. La mala noticia para el técnico catalán ha llegado cuando se ha enterado de que Manchester City y Sporting de Portugal cerraron el acuerdo de cesión con una opción de compra de 8,5 millones que los portugueses están dispuestos a utilizar.

Si ello se termina haciendo realidad, el negocio para el City habrá sido nefasto, que habría perdido casi 4 millones de euros más el sueldo del futbolista para no tenerlo listo justo en el momento en el que le necesitaban. Nadie en el club se ha atrevido a reconocer a Guardiola quién fue el “culpable” de que ese pacto se cerrase por el tremendo cabreo que llevaba encima el mister español.