Guardiola y Klopp meten intriga en la Premier: objetivo joven y barato

Enero está generando mucho ajetreo en las oficinas de los principales clubes europeos y tanto Pep Guardiola como Jürgen Klopp está tratando de estrechar lazos por el mismo jugador, Denis Zakaria. El centrocampista del Borussia Mönchengladbach lleva en la agenda de los grandes de Europa desde el pasado mercado veraniego y su expiración de contrato el próximo 30 de junio aumenta ese rifirrafe Premier por hacerse con sus servicios.

Es cierto que la emoción en el plano deportivo ha decaído notablemente tras los últimos tropiezos del Chelsea y del Liverpool, los cuales han permitido distanciarse a los skyblues, pero en los despachos la guerra está más candente que nunca, especialmente entre los dos equipos que persiguen al jugador suizo.

Zakaria lleva varias campañas dejando unas credenciales muy notables en la medular del conjunto alemán, unos méritos muy por encima de los registrados por sus compañeros y los cuales vaticinan un salto de calidad inminente. Precisamente el cuadro teutón, consciente de que el 30 de junio Zakaria se marcharía gratis, no quiere desaprovechar la oportunidad que le brindan Liverpool y City con su interés y están dispuestos a aceptar su salida en este mismo mes con tal de rescatar una suma cercana a los 20 millones.

Por un lado, Guardiola quiere que el jugador aterrice en el Etihad Stadium ya que Fernandinho abandonará el club al finalizar la campaña y necesita una alternativa de garantías para competir el puesto con Rodri Hernández. Eso sí, el rendimiento del futbolista español está siendo excelso en los últimos meses y, si se confirma la llegada de Zakaria, este no tendrá nada fácil arrebatar esos minutos al exfutbolista del Villarreal y Atlético de Madrid.

Por su parte, aunque Klopp cuenta actualmente con varios jugadores para desempeñar funciones similares a las de Zakaria, tanto James Milner como Thiago Alcántara y Naby Keita viven una situación altamente dubitativa en Anfield y sus posibles salidas al finalizar la campaña precipitan la necesidad de buscar alternativas de nivel para el centro del campo, siendo el futbolista helvético de 25 años uno de los elegidos por el técnico teutón para ello.