Harry Kane cumple su promesa y decide el equipo en el que quiere estar

Cuando, a comienzos del mes de abril, Joan Laporta preguntó por las intenciones de Harry Kane de cara a la próxima temporada, el presidente del Fútbol Club Barcelona obtuvo una esperanzadora respuesta: a partir del 26 de abril el internacional inglés comenzaría a decidir su futuro que no pasaba, con casi total seguridad, por seguir en el equipo londinense ni un año más.

El día citado no era uno cualquiera: la final de la Carabao Cup que iban a disputar Tottenham Hotspur y Manchester City en Wembley. Si los Spurs se imponían, podrían tener algún argumento a la hora de tratar de convencer a su jugador franquicia de que siguiese más tiempo con ellos: se podían ganar títulos allí. Pero la final cayó del lado citizen y, con él, se marcharon las pocas opciones que había de que Kane se quedase más tiempo con los de Daniel Levy.

Tras unas semanas decidiendo, el destino Kane ya lo tiene claro: quiere jugar a las órdenes de Pep Guardiola en el Manchester City. A sus 27 años el 9 de Inglaterra siente que le ha llegado el momento de ir a un equipo campeón o con serias opciones de serlo. Seguir en el Tottenham sería alargar una sequía que no debe prolongarse más allá de este verano. Llegar a finales está bien, pero Kane quiere ganarlas.

Por si fuese poco el Tottenham Hotspur está siendo entrenado por un joven de 29 años y sigue sin tener un entrenador de cara a la nueva temporada que se iniciará el próximo mes de julio, lo que tampoco ayuda para convencer a la estrella. Sin proyecto se complica todavía más el asunto.

De esta forma Laporta tiene claro que su única apuesta debe ser Erling Haaland, algo que ya adelantamos aquí en Don Balón y que es el motivo por el que el equipo español ha apostado por el jugador argentino del City, el Kun Agüero. Lo que si que está claro es que, para lograr hacerse con Kane, el City tendrá que abonar una cantidad de dinero superior a los 70 millones de libras aunque eso parece que no será un problema.