¡Jürgen Klopp tendrá un destino bomba al abandonar el Liverpool!

El Liverpool consiguió la hazaña, y acabó clasificándose para la próxima edición de la Champions League. Algo que parecía impensable hace unos meses, pero que ha acabado ocurriendo, y no solo eso, si no que, además, lo han conseguido acabando en el tercer puesto de la Premier League. Una cosa especialmente meritoria, viendo la plaga de lesiones que han sufrido, de cracks como Virgil Van Dijk, Joe Gómez o Jordan Henderson, que son indiscutibles.

No se puede decir que la temporada haya sido un éxito, ni mucho menos, pero ha acabado muy bien, teniendo en cuenta como pintaba. Jürgen Klopp ha vuelto a hacer un milagro, ya que nadie apostaba por que lo lograrían, e incluso, se podían quedar fuera de competiciones europeas. Pero eso no ha evitado que muchos sigan especulando y hablando acerca de su futuro, pues algunas fuentes cercanas decían que ya daba su etapa en Inglaterra por finalizada.

Pronto se cumplirán seis años de su contratación, y ha conseguido su gran objetivo, que era darle una liga a los ‘reds’, después de 30 años, y reinar en Europa. Cierto es que su relación con algunos jugadores no pasa por su mejor momento, y que su proyecto comienza a dar síntomas de agotamiento, como lo daba cuando se fue del Borussia Dortmund. Pero, como su agente afirmó, todavía tiene contrato de larga duración, hasta 2024.

Y en Anfield no tienen la más mínima intención de despedir al que para muchos ya es el mejor entrenador que han tenido en su historia. Incluso se atreven a colocarle por delante de Bob Paisley y Bill Shankly, dos auténticas leyendas. Eso si, Klopp ya ha dejado caer que no tiene intención de hacer como Alex Ferguson, y seguir mucho más tiempo en un club. Real Madrid o Barça suenan como sus posibles destinos, pero ahora, ha cobrado fuerza otra vía.

Porque, al parecer, al ex del Mainz 05 también le seduce especialmente acabar su carrera en América, concretamente, en México. Un destino cada vez más recurrente para los europeos, como se puede ver con Florian Thauvin o André-Pierre Gignac.

Sería la bomba.