Klopp y Tuchel chocan por el crack de los 45 kilos: Guardiola, atónito

La Premier League ha arrancado de una forma sumamente igualada en lo que a la lucha por el campeonato se refiere y dos de los equipos inmersos en esa guerra, el Liverpool y el Chelsea, tienen un motivo más de disputa: el fichaje de Allan Saint-Maximin, uno de los jugadores de moda en la liga inglesa.

Según ha firmado CalcioMercato en las últimas horas, Jürgen Klopp y Román Abramóvich han fijado sus ojos en el jugador del Newcastle como una de sus máximas prioridades para reforzar el vestuario de cara al próximo curso. Hasta que se reabra el mercado veraniego de 2022 todavía pueden pasar muchas cosas, pero el interés por el delantero francés parece ser tan alto que incluso ambos clubes parecen estar dispuestos a poner sobre la mesa 45 millones de libras para hacerse con los servicios del galo.

Saint-Maximin aterrizó en la Premier League hace poco más de dos años procedente del Niza, club donde ya dejó destellos de las excepcionales cualidades ofensivas que atesora: velocidad, mucha capacidad para el desborde de oponentes y una facilidad envidiable para desordenar defensas con sus continuos movimientos con y sin balón. Eso sí, el déficit de gol que ha manifestado (solamente nueve goles oficiales con la camiseta blanquinegra en las dos últimas campañas) le ha privado de ser cotizado por clubes de mayor entidad, algo que Klopp y Tuchel están dispuesto a cambiar el próximo verano brindándole la oportunidad en un equipo que genere muchas más ocasiones en cada partido.

Si finalmente el movimiento se certifica, otro de los grandes afectados será Pep Guardiola en el Manchester City. El conjunto citizen ha seguido muy de cerca la evolución del jugador durante la última campaña y las posibles salidas de Riyad Mahrez y Raheem Sterling le habían situado como una de las alternativas para enfundarse la elástica azulada. Ahora, Liverpool y Chelsea se han adelantado a los del Etihad en la lucha por Saint-Maximin y, si nada se tuerce, será el futbolista el que decidirá, conforme finalice el curso, dónde quiere recalar el próximo verano, si en Anfield o en Stamford Bridge… aunque sin perder de vista a los skyblues: ¿Alguno subirá la puja?