Mino Raiola evita al United y la lía ¡Paul Pogba a subasta por 100 kilos!

En el entorno del Manchester United, y el propio Ed Woodward se ha encargado de refrendarlo, han dicho por activa y por pasiva que Paul Pogba vale de 180 a 200 millones de euros, ni uno más ni uno menos. Eso es lo que opinan de puertas a fuera, porque en el United saben que se acerca la fecha de vencimiento del contrato de un jugador que lleva un año sin jugar, aún tiene cartel y se está devaluando a marchas forzadas. Tiene pretendientes, pero van a la baja, y como los red devils han sido inflexibles, es Mino Raiola, agente del jugador, el que ha tomado al mando de las operaciones, ¡sacando a subasta al jugador!

En el seno del histórico club inglés están enfadados con el representante del jugador y el mismo Pogba ya que esperaban bajar sus pretensiones por el medio centro, sí, pero querían seguir una estrategia más formal y que pudiera hacer morder el anzuelo a sus grandes pretendientes, el Real Madrid –cada vez menos- y la Juventus de Turín. Ahora, con esta subasta en toda regla del agente italiano, que se la ha expuesto abiertamente a blancos y turineses, la cifra se ha rebajado cuantiosamente.

Y eso es un problema para los diablos rojos, más que nada porque el mercado va a ir a la baja con la pandemia por el coronavirus, por lo que haber instaurado la salida de Pogba en 100 millones de euros, que es en lo que ha cifrado Raiola a su jugador, implica que el Madrid y la Juve querrán sacarlo de Inglaterra por menos. Sin ir más lejos el Madrid ya ha hecho una contraoferta: 60 millones de euros. En Old Trafford ven esta cifra muy por debajo de lo que quieren, pero hay un problema a mayores: la Juventus también se planta.

Y en ese juego de tira y afloja, con el jugador a la baja, solo pueden salir ganando Pogboom y sobre todo Raiola. El representante va a introducir siempre clausuras por comisiones, sea a los italianos o a los madrileños, por lo que él siempre va a sacar tajada. Por su parte, el centrocampista está llegando a la fase final de su recuperación y sabe que el United no se puede permitir tenerle parado. Unido a ello, Pogba acaba contrato y los ingleses están obligados a negociar por él… salvo, claro está, se decidan a dejarle otro año en el dique seco. Ni Pogba ni Raiola lo creen, se han cansado y quieren forzar su salida.