Mudryk enloquece Londres: el Chelsea da la patada al as de Guardiola

El extremo adquirido del Shakhtar Donetsk puede acabar con el gran fichaje venido del City este pasado verano

Mudryk enloquece Londres: el Chelsea da la patada al as de Guardiola

El fútbol moderno va muy deprisa y en la élite, donde -cada vez más- solo los éxitos marcan el fracaso o el triunfo, esta velocidad se dispara. Y si no que se lo digan al Chelsea, el equipo, de lejos, que más se ha gastado durante la 2022/23 y que con su última adquisición, el extremo adquirido del Shakhtar Donetsk, Mykhaylo Mudryk, por cerca de 100 millones de euros, además de la cesión de João Félix, se ve obligado a poner en el mercado al as de Pep Guardiola, ese que hace solo unos meses llegó a Londres como incorporación clave y millonaria de futuro en Stamford Bridge.

Advierte Football Insider que la llegada del portugués y la del ucraniano ponen en serios apuros a Raheem Sterling, jugador que llegó a la capital inglesa en julio como un acierto absoluto de Todd Boehly, mandamás en el club, y el entonces entrenador del equipo blue, Thomas Tuchel. Hoy, con Graham Potter en el banquillo y con el equipo londinense sumido en una crisis profunda de resultados, el extremo inglés parece ser prescindible, ya no es importante.

Boehly

Sterling en estos momentos está lesionado, sin embargo ve como las dos grandes incorporaciones invernales del club, una de ellas con carácter de estrella mundial, como es Mudryk, llegan para, en cierta forma, quitarle el puesto, lo que no solo advierte de las intenciones del Chelsea con Sterling, que no está satisfecho con su rendimiento, sino que hace saltar las alarmas en el jugador y su entorno.

El citado mass media incluso pone énfasis en que ya se podría estar planeando una salida prematura del que fuera traspaso estrella en verano procedente del Manchester City. Allí, en el Etihad, también lo fue en su día, en este caso procedente de Anfield, no obstante todo hace indicar que la carrera de Sterling va en franco retroceso, de más a menos, y si sale de Londres, que está por ver, su futuro será incierto. Otra cosa es que otro grande europeo crea en él, pero en eso el Chelsea lo tiene difícil: pretenden venderlo, sí, pero por su precio de compra, unos 60 millones (oficialmente 56,20), una cantidad hoy desproporcionada por un futbolista que ha hecho 6 goles y ha dado 3 asistencias en 22 partidos, pero que sobre todo no arroja buenas sensaciones.