Palo para el Real Madrid, Zidane desesperado con la pérdida del galo

El problema de guardar durante tanto tiempo la ropa es que al sacarla puede haber pasado de moda, y el Madrid hace tiempo que tira de sus viejas glorias para solucionar sus problemas; y lo que es peor, asienta sus esperanzas exclusivamente sobre ellas. Por hablar del más recurrente, cuando el pasado sábado Casemiro sufrió un golpe en su tobillo, Zizou se puso a temblar. Y lo ha hecho en las últimas dos temporadas cada vez que el brasileño quedó tendido sobre el césped; sencillamente porque no tiene otro Casemiro en su plantilla, y el que quería, el que podía hacer sombra al carioca entre los merengues, su gran deseo, ahora pone rumbo al Manchester United: se esfumó otra posibilidad, otra ilusión.

El Chelsea fue claro al respecto de N’Golo Kanté: los fichajes que ha hecho la escuadra blue han sido importantísimos y muy caros, luego el francés era uno de los prescindibles, más que nada porque se confía en mayor medida en Jorginho. Ahora bien, sí, Frank Lampard, entrenador del cuadro de Stamford Bridge, lo quería (y quiere) vender, pero por una cantidad importante por él; y el Madrid al oir eso, una vez más, se ha echado a un lado. Todo lo contrario que un United que se lanza a contratarlo ya que ve como su primera opción, Jadon Sancho, se esfuma.

A falta del sueño del extremo inglés del Borussia de Dortmund, buenos son un par de retoques en la plantilla de los red devils, piensa su míster Ole Gunnar Solskjaer, y uno de ellos está a punto de ser nueva realidad de Old Trafford a costa del anhelo de Zidane: Kanté. Los diablos rojos opinan que el 5 de Les Bleus puede darles ese equilibrio para el que Paul Pogba, Van de Beek y Bruno Fernandes no están tan dotados; es más, Solskjaer piensa que con Kanté en la plantilla podrá liberar a los tres futbolistas y que estos sean más incisivos en ataque. Y ya de paso, el fichaje de Kanté por el United arruina la ilusión de Zidane.

Si se esfuma Kanté para esa posición, la de stopper, al Madrid solo le queda ir a la guerra la temporada que viene por Eduardo Camavinga, donde equipos como el Paris Saint-Germain o el Manchester City también estarán en la pelea. Pero para Zidane es doblemente dramático perder a Kanté, ya que la ilusión hipotética de Camavinga solo se haría efectiva en la campaña 21/22 mientras que en esta deberá volver a cruzar los dedos para que Casemiro no se lesione. El Madrid sigue sin recambio para su número 14 y se va el jugador que Zizou deseaba para esa función: la incertidumbre vuelve a crecer.