Solskjaer da una bofetada de realidad a Pep Guardiola

El Manchester City de Pep Guardiola llevaba 21 victorias consecutivas, e iba lanzado a por la número 22. Pero se encontró con el peor panorama posible al comenzar el encuentro frente a su vecino y rival, el Manchester United de Solskjaer, con un penalti en contra, realizado de forma infantil por Gabriel Jesús, le puso el partido cuesta arriba y no fue capaz de remontar. Es más, el City prácticamente no dio señales de peligro en todo el partido y en un contragolpe demoledor del United, Shaw anotó el segundo gol tras una galopada espectacular, estableciendo el definitivo 0-2.

Se enfrentaban dos escuelas distintas del fútbol, por un lado, la del de Santpedor con ese fútbol control, la posesión del balón como método defensivo y aceleración del juego al llegar al área contraria, con esta idea Guardiola dispuso un 4-1-4-1, tratando de acumular gente en el centro del campo y con dos interiores veloces, que buscaban precisamente al culpable del primer gol en contra, Gabriel Jesús, que estaba situado como delantero centro. Por otro lado, la visión de Ole Gunnar Solskjaer es distinta a la de Pep, cree más en la verticalidad a partir del robo de balón, por eso dispuso un 4-2-3-1, con Fred y McTominay por delante de la defensa y con Williams de media punta, justo por detrás de Martial, el único punta del United.

Esta derrota pone fin a una de las mejores rachas del conjunto skyblue, pero no pone en peligro la situación de los pupilos de Pep Guardiola en la Premier League, ya que sigue manteniendo a los de Solskjaer como segundos en la clasificación a 11 puntos de distancia. Lo que sí es destacable es que el técnico noruego le ganó la partida al catalán. En los duelos en el centro del campo fueron superiores el 95% de las ocasiones y, aunque el City tuvo sus oportunidades, incluso Rodri estrelló el esférico en el larguero de la portería de Henderson, el gol no quiso llegar y en sus contrataques el United tuvo oportunidades para conseguir una victoria más abultada. No obstante, Guardiola está tranquilo y así lo transmitió en la rueda de prensa posterior al encuentro, considera esta derrota como un bache y quiere centrarse ya en el próximo partido.