¡Temible! Pep Guardiola se ríe ¡Ojo a la advertencia del Manchester City!

Por las demostraciones mostradas por el Paris Saint-Germain, se ha dado por supuesto que el cuadro francés era el más poderoso económicamente del mundo, más que nada por la inyección que puede aportarle Nasser Al Khelaifi, su propietario, y las inversiones millonarias por Kylian Mbappé y Neymar Junior. Pero nada más lejos de la realidad porque según el patrimonio de los grandes propietarios de entidades futbolísticas, y por tanto la capacidad de obrar, Sheikh Mansour, dueño del Manchester City de Pep Guardiola, está por encima del parisino. Muy por encima. Y esto puede verse como una advertencia para todos aquellos clubes con ganas de hurgar en la plantilla skyblue.

Y es que según el balance de algunos de los dueños de varios de los clubes más importantes económicamente del mundo, el jeque del cuadro citizen es, de lejos, el más rico. Con un patrimonio neto que se eleva hasta los 20.000 millones de dólares, el jefe de Guardiola tiene a buen recaudo el fondo de armario del equipo que dirige el de Sampedor. En este sentido, el interés de equipos como el Real Madrid o el mismo PSG en Raheem Sterling o Riyaz Mahrez no podrá encontrar una satisfacción positiva para madridistas y franceses por la vía económica.

Tampoco, a tenor por su patrimonio, podría el Liverpool de Jürgen Klopp tentar a Timo Werner por la vía de los millones, ya que el propietario del Leipzig y el Salzburgo, Dietrich Mateschitz es el segundo de la lista con una fortuna que va hasta los 19.400 millones de dólares. Algo similar le ocurre a Cristiano Ronaldo y su Juventus de Turín, que se sienten respaldados por Agnelli y el patrimonio de su familia que asciende a 13.500 millones.

Roman Abramovich, el magnate ruso propietario del Chelsea, ocupa la cuarta posición de la tabla con un patrimonio cercano a los 12.400 kilos, según la moneda norteamericana que impera en el índice bursátil Dow Jones. Al Khelaifi está en 8 mil millones de dólares. Todos estos equipos están ahora mismo viéndose afectados por la crisis por el coronavirus y tienen la ventaja de tener el respaldo de una inversión superior, pero la desventaja de estar sujetos a sus caprichos, de lo que se libran el Barcelona o el Real Madrid.