Tuchel abre la puerta y Simeone se enfrentará a su ‘enemigo’ sorpresa
La decisión del técnico alemán es firme y hay pruebas que lo avalan
La situación deportiva que está viviendo Saúl Ñíguez esta temporada está muy cerca de asemejarse a un calvario. El futbolista dejó el Atlético de Madrid, contra todo pronóstico, en los instantes finales del mercado veraniego de 2021 y, a pesar de que Thomas Tuchel parecía muy interesado en contar con sus servicios, el técnico apenas le ha brindado protagonismo en el Chelsea.
El centrocampista alicantino de 27 años únicamente ha podido disfrutar 700 minutos en lo que va de campaña, la gran parte de ellos en competiciones de menor importancia como la Carabao Cup o la EFL, y todo parece encaminado para que el jugador regrese al Wanda Metropolitano tras su cesión el próximo 30 de junio. Por ende, esto conllevará dos cosas: que el Chelsea no ejecutará la opción de compra de 40 millones que tiene sobre la mesa y, además, que Diego Pablo Simeone deberá lidiar con un problema imprevisto en el Atlético de Madrid.
Ya en el mes de agosto, cuando se confirmó la salida de Saúl, se habló de que el motivo de peso que había conllevado esta decisión era la mala relación entre el técnico argentino y el centrocampista español, especialmente por la disconformidad de este cuando el entrenador apostaba por él como lateral izquierdo o en otra de las posiciones en las que no se encuentra a gusto.
Pero eso no es todo, ya que Goal ha desvelado en las últimas horas unas declaraciones del futbolista que desde luego no pasarán desapercibidas en territorio rojiblanco y que, a su vez, genera muchas dudas sobre la presencia de Saúl Ñíguez en la plantilla rojiblanca 22/23 y del compromiso que este pueda tener con el club: “Necesitaba sacar un tiempo la cabeza del mundo del Atlético de Madrid porque estoy desde los 12 años y todo me afectaba mucho más”.
Además, a pesar de la poca participación que está teniendo esta temporada, Saúl ha aprovechado la ocasión para elogiar la buena labor de Tuchel y, sobre todo, una premisa impuesta por el alemán en el plano deportivo: defender hacia adelante, algo que en el conjunto atlético no ocurre dado que la consigna de Simeone a este respecto es totalmente opuesta.
En definitiva, la situación de Saúl es muy delicada en Stamford Bridge, a pesar de que parece sentirse muy cómodo, y su regreso a Madrid depara muchas incógnitas que solamente Simeone podrá despejar, aunque este no lo hará hasta el próximo verano.