Zidane sonríe y en Manchester le amenazan: Pogba solo piensa en el Madrid

La Premier vivió su segunda jornada. El fútbol en Ingalterra ya no para y de aquí a final de año, entre Premier, Championship y divisiones inferiores no habrá prácticamente un día del año donde no haya un partido de fútbol. En Inglaterra una vez echa a rodar el balón, a principios de Agosto las categorías profesionales más bajas del fútbol inglés, el deporte se convierte en religión y la calle huele a goles, tackles, barra de bar y pinta de cerveza. El fútbol en Inglaterra, el que lo haya vivido en primera persona lo sabrá, es otra cosa.

La Premier sigue dando espectáculo y ya tiene como líder al Liverpool, junto al Arsenal, que ganó al Southhampton por 1 gol a 2 el sábado. Marcaron Mané y Firmino y los de Klopp continúan puntuando y sin fallar.

Como si lo hizo el City que empató a dos contra el Tottenham en el Etihad. Otra vez el VAR anuló un gol en el descuento al City, despertando la pesadilla de la Champions del pasado año. El Arsenal de Dani Ceballos venció en casa al Burnley, 2 a 1,  con dos asistencias de gol del español.

Arsenal y Liverpool son los dos únicos equipos que han conseguido dos victorias en los dos partidos. Cosa que habla muy bien de la premier y su igualdad. El Chelsea de Lampard sigue sin ganar un encuentro oficial este año y empató en casa contra el Leicester.

Ayer en el último partido de la jornada tenía la opción el United de colocarse con 6 puntos y verse arriba después de mucho tiempo, pero falló. Empezó ganando al Wolves, pero el siempre correoso equipo del ex técnico valencianista Nuno Espíritu Santo empató el encuentro. El VAR intervinó para dictaminar pena máxima a favor de los “diablos rojos”. Pogba, ante la sopresa de muchos,  decidió lanzarlo. Falló. Su cabeza no está en Manchester.

Pese a que el jugador sabe que marcharse será un milagro no tiene la cabeza en el equipo. Quería salir este verano y no ha podido. Zidane sonríe porque sabe que es cuestión de tiempo que el francés acabe jugando de blanco. En Manchester tienen más motivos para estar enfadados con Pogba. Hoy ha recibido insultos racistas ya amenazas de muerte. Se pone feo el futuro de Paul. Aún más. No piensa ya en “rojo”. Pero este año deberá seguir con ellos. Malos tiempos para Paul.