Modric es quien le ha pedido que deje de perjudicar al Real Madrid
El capitán blanco tira de galones e intenta apagar un fuego dentro del vestuario

Modric es toda una leyenda del Real Madrid. A sus casi 40 años podría estar viviendo su última temporada en la casa blanca. Pero su implicación con el club desde el primer día que llegó procedente del Tottenham es encomiable. Seguramente, dejará un ejemplo a seguir para futuros futbolistas que lleguen a la entidad madrileña.
Pero antes de cerrar su periplo blanco, el capitán croata ha tenido que lidiar con situaciones incómodas. Como a todo capitán de un equipo del nivel del Real Madrid, se le pide que esté a la altura dentro y fuera del campo. Y Modric ha tenido que vivir un último acontecimiento desagradable con un compañero de vestuario.
El pique de Modric con Vinícius viene desde Leganés
La tensión entre ambos futbolistas saltó por los aires en el partido de cuartos de final de Copa del Rey que el Real Madrid disputaba en Butarque ante el Leganés. En un partido muy ajustado y el equipo blanco jugándose un billete para semis, Vinícius la volvió a armar.
Quedaban cinco minutos para el final del tiempo reglamentario y el Madrid sufría tras dejar escapar una ventaja de dos goles arriba en el marcador. No estaba la cosa para 'regalos' ni faltas de actitud y eso fue precisamente lo que encendió la mecha del pique que tuvo a Vinicius y a Modric como protagonistas. Porque saltaron chispas entre ambos en el momento más tenso del partido. El cara a cara en la distancia entre ambos lo pudo ver todo el estadio y Ancelotti dejó clara su posición al respecto al final del partido: "Si habla Modric y hay que respetarle".
Modric vuelve a advertir a Vinícius y le deja de hablar
Como veterano y capitán, Modric volvió a advertir muy enfadado a Vinícius que dejase las cuestiones extradeportivas fuera de los terrenos de juego. El croata piensa que estas actitudes infantiles e irritantes del brasileño solo hacen que perjudicar al equipo porque lo descentran. El ‘10’ del Madrid tuvo otra bronca a solas en el vestuario del Madrid y Vinícius no se lo tomó nada bien.
El extremo brasileño explotó. Su castigo es retirarle el saludo desde entonces. Pero a Modric le importa poco. Tiene el beneplácito de los capitanes, que también se han distanciado de Vinícius, y de buena parte de la plantilla, además del propio Carlo Ancelotti. Las relaciones en vestuario blanco están que arden en estos momentos. Seguramente en el peor momento. Ancelotti no puede castigar a una de sus figuras sin jugar. Se están decidiendo los grandes títulos de la temporada. Pero tampoco puede permitirle su actitud. Ancelotti vive entre la espada y la pared, mientras ve como su vestuario es un auténtico polvorín.