Brahim e Ibrahimovic se lo quitan a CR7 y Conte: crack para el Milan
Es un jugador deseado por otros grandes, como el Barça
El nuevo proyecto del que fuera todopoderoso AC Milan (aún hoy en día es el segundo club más laureado de la historia en la Copa de Europa, con siete entorchados) va tomando forma y esa silueta no es menor. Más aún si consiguen hacerse con una pretensión de muchos grandes, sobre todo de Italia, y que ahora Stefano Pioli quiere para su club. A la confirmación de Zlatan Ibrahimovic, Sandro Tonali o Brahim Díaz (cedido por el Real Madrid), ahora se suma la gran esperanza del fútbol italiano, que no es otro que Federico Chiesa.
La apuesta es clara en la entidad rossonera, invertir una importante cantidad de dinero para completar un proyecto ilusionante que se propone asaltar (o estar cerca de ello) la Serie A y tratar de llevarse un título europeo tantos años después (disputan, este año sí, la Europa League). Y es buena señal del resurgir milanista el hecho de que le peleen fichajes como el de Chiesa a otros grandes europeos, ya que el joven talento transalpino está en la agenda de, entre otros, la Juventus de Turín, Inter de Milan e incluso lo estuvo del FC Barcelona.
Ahora bien, no será fácil que la Fiorentina, club propietario de Chiesa, se deshaga del futbolista, ya que piden por él una cantidad enorme, más aún en plena pandemia por el coronavirus: 60 millones de euros. En este sentido, el Milan no puede permitirse un traspaso así, pero sí una cantidad cercana a los 40 millones de euros. El cuadro viola, por su parte, se pensaría su traspaso, aunque pretendían en Florencia que el jugador no saliera por lo menos hasta el próximo verano (acaba contrato en 2022).
Y este crecimiento del proyecto del heptacampeón europeo no solo se dirige en la ciudad de la Toscana hacia el extremo, sino que también están sondeando, según apunta El Corriere dello Sport, hacia otro puntal de la plantilla viola, Nikola Milenkovic. Pues bien, la estrategia de AC Milan al respecto es ofrecer una cantidad cercana a los 65 millones de euros por los dos jugadores, de tal forma que minimizan con un traspaso conjunto el montante y se hacen con dos grandes y jóvenes jugadores. Brahim y Zlatan están encantados.