Canterano del FC Barcelona, fracaso de época del PSG, colega de Leo Messi y sorpresón en Italia

Empezar la temporada cosechando buenos resultados ni mucho menos va vinculado a buscar refuerzos con antelación y ahí que el último objetivo fijado por Simone Inzaghi en el Inter de Milán no pueda ser más sorprendente: Mauro Icardi.

El atacante rosarino del Galatasaray está siendo uno de los arietes más en forma del curso y sus prestaciones han comenzado a situarle en el Giuseppe Meazza a partir del mes de enero. Es cierto que el Inter ya cuenta en sus filas con delanteros de la talla de Lautaro Martínez, Marcus Thuram o Alexis Sánchez, pero Icardi se ha convertido en una prioridad para el técnico italiano teniendo en cuenta que el jugador sigue siendo un hombre muy querido por la afición nerazzurra.

Muchos no sabrán que Icardi pasó por la cantera del FC Barcelona, club en el que no llegó a debutar con el primer equipo, y que el conjunto catalán fue su trampolín a la élite europea, primero recalando en las filas de la Sampdoria y poco después en el Inter de Milán, donde se puede afirmar rotundamente que el argentino, amigo íntimo Leo Messi y Ángel Di María (todo nacieron en la misma ciudad), vivió sus mejores años como futbolista.

Sus prestaciones en Italia le permitieron llamar la atención del PSG y no dudó Nasser Al-Khelaïfi en cerrar su fichaje en 2019, pero en ningún momento Mauro Icardi logró hacer frente a las altas expectativas depositadas en esta operación y su etapa en el Parque de los Príncipes estuvo marcada por sus continuas cesiones y por sus decepciones deportivas.

Ahora, en el Galatasaray ha logrado convertirse en uno de los delanteros de moda en Europa y, todavía con 30 años a pesar de su extensa trayectoria, está a un paso de regresar a Italia como todo un sorpresón para los seguidores del Inter de Milán.