El sueño de ser como la Juventus se termina para la Roma, de momento…

Dan Friedkin ha asegurado que es cuestión de tiempo que el proyecto salga adelante

El sueño de ser como la Juventus se termina para la Roma, de momento…

El proyecto de Dan Friedkin, el actual propietario de la Roma, se ha venido abajo aunque según ha asegurado él mismo, que no se continúe con la opción que estaba planteada no significa que el nuevo estadio no vaya a salir adelante. El anterior dueño de la Roma, James Pallotta, inició en 2017 un proyecto con la idea de construir un nuevo estadio que perteneciese al club italiano en propiedad, a diferencia del actual Estadio Olímpico, propiedad del Comité Olímpico italiano.

Lo cierto es que aquel proyecto, cuya localización para el nuevo estadio se encontraba al sureste de la ciudad, en una zona conocida como Tor Di Valle, se ha terminado viniendo abajo por una serie de problemas muy propios del país transalpino: una trama de corrupción que llevo a detener a 8 personas en 2018, falta de consenso en las autoridades a la hora de conceder los permisos y las licencias debido a una serie de dudas surgidas en torno a la viabilidad del nuevo estadio ante problemas tales como el tráfico de la zona, ya elevado de por sí y donde no existe una red de comunicaciones demasiado buena o las preocupaciones medioambientales.

Todo ello han tirado por tierra el plan de Tor Di Valle pero Dan Friedkin ha querido tranquilizar a una afición que tiene muchas ganas de mudarse a un estadio propio y dejar de compartir instalaciones con su archienemigo, la Lazio también romana. Por eso ha querido expresar su total compromiso con la búsqueda de una nueva zona donde poder construir su nuevo estadio, el que sobre el plano está pensado llamar Stadio della Roma.

En el fútbol italiano es muy poco común que un equipo posea en propiedad el estadio donde juega, tanto que tan solo dos equipos en Italia pueden afirmar que tienen su propio estadio y que este no es municipal (comunale en italiano, de ahí que tantos campos en Italia tengan dicha palabra en su nombre oficial) que son la Juventus y el Udinese. Los de Udine lo compraron hace unos años al gobierno regional, pero la Juventus hizo en 2017 lo que la Roma lleva soñando desde entonces: construir su propio campo.

Olímpico de Roma

Puede que en unos meses haya noticias a cerca del nuevo campo de la Roma, aunque de momento tendrán que seguir jugando en la gigantesca construcción que Mussolini ideó en 1927 y cuya construcción, debido a sus desorbitadas proporciones, no finalizó hasta 1953.