La sentencia para Setién llega en forma de venta al Milán de su petición

25 millones tienen la culpa

La sentencia para Setién llega en forma de venta al Milán de su petición

Una de las peticiones de Quique Setién para el año que viene era la de Emerson Royal. El lateral derecho del Betis, cedido por el club culé desde el invierno pasado, volvía al Barcelona para esta vez sí vestirse la camiseta blaugrana. Setién le quería y pensaba en él como el jugador perfecto, equilibrado, para ser el carrilero que necesitaba en su 1-3-5-2. Sin embargo, todo se ha ido al traste, la directiva recibió una oferta del Milán por el brasileño y lo venden por 25 millones. El entrenador cántabro ha visto su sentencia en forma de venta.

Una petición que no le dan 

Emerson quería volver al Barcelona y pensaba que estaba preparado para ello tras dos temporadas en Sevilla donde ha ido de menos a más. El jugador, al que muchos ven como titular con Brasil en el futuro, ha mejorado mucho sobre todo en el aspecto defensivo. Ofensivamente es un puñal y gracias a su físico no se cansa de subir y bajar de manera constante.

El Milán, por su parte, sueña con llegar a un acuerdo en pocos días y cerrar así a un lateral que le va a permitir equilibrar el equipo. Por la izquierda está Theo Hernández, ex del Madrid y que ha sido uno de los mejores laterales izquierdos del mundo, y por la derecha se encontraría Emerson. El equipo rossonero tendría así dos bandas realmente espectaculares, impropias del Calcio y de La Serie A, pero apropiadas para el fútbol moderno y de ataque que propone el entrenador del equipo italiano, Stefano Pioli.

Setién ve como su proyecto se cae, se desvanece entre sus manos sin que pueda hacer nada. Ahora mismo sabe que su vida en el Barça depende de un milagro, y ese milagro se llama Champions League. Si gana el título puede que por vergüenza Bartomeu le mantenga en el cargo… pero a día de hoy parece imposible que el Barça consiga levantar la orejona.

El camino de Quique Setién parece claro, muy claro: de vuelta a Cantabria.